El grupo parlamentario del PRD en la Asamblea Constituyente se pronunció por plasmar en la Constitución local que el Gobierno de la Ciudad de México podrá fijar el salario mínimo que habrán de tener los capitalinos, con el objetivo de no estar sujetos a lo que mandate el gobierno federal.
Asimismo, los integrantes de esa fracción se manifestaron a favor de la desaparición de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos, al considerar que ha servido “para controlar política y económicamente a los gobiernos locales”.
“Pensamos que, siendo una entidad de la Federación, con autonomía, deberíamos de fijar también autonomía en términos del desarrollo de la economía de la entidad.
"Un elemento fundamental de la economía de la entidad es el salario y, yo insisto, que deberíamos de crear mecanismos para que en la Ciudad de México las personas tuvieran acceso a un salario digno para garantizar una vida de dignidad", expresó el diputado constituyente Jesús Ortega.
Explicó que actualmente, la Secretaria de Hacienda y Crédito Público, ha manejado una visión “esquemática, dogmática, de que los salarios no pueden aumentar”, por lo que se busca crear una “visión progresista” que deje atrás “la visión antigua del salario mínimo”.
Los constituyentes perredistas destacaron que una de las propuestas de su partido es que los funcionarios públicos no podrán incrementar su salario sin consultarlo con los habitantes de las 16 delegaciones de la capital del país.
Pretenden que en el texto constitucional se establezca que ningún funcionario en la Ciudad de México pueda ganar más que el jefe de Gobierno, aunque debe contener los criterios para que se fijen salarios bien remunerados, a fin de contribuir al desarrollo económico del país.