Una histórica petición de los actores sociales de la zona conurbada del sur de Tamaulipas, es sobre los accesos a una región que tiene entre sus fortalezas económicas dos puertos de altura, por los que llegan y salen productos a mercados internacionales.
El delegado para el estado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) se reunió ayer con empresarios pertenecientes al Consejo de Instituciones Empresariales del Sur de Tamaulipas (Ciest), ante quienes expuso, como uno de sus temas, las gestiones presupuestales para el 2018.
Fue en ese marco donde se pudo conocer que la continuación de la autopista México-Tuxpan hasta Tampico se quedará en Ozuluama, un poco más de 100 kilómetros antes del deseado destino final.
La conclusión de una moderna y ágil conexión de la CdMx con Tampico y su zona conurbada era una solicitud constante del sector empresarial, y en particular un objetivo de Eduardo Manzur Manzur, como presidente del Ciest, organismo en el que coinciden grupos económicos que también anhelan tener una región mejor conectada.
Al día de hoy, la autopista está lista hasta Ozuluama como parte del contrato con una empresa de capital portugués, que además de la construcción será la encargada de su operación, eso ya se conocía.
El tramo que sigue hasta terminar en Tampico tiene que ver con la aplicación de recursos públicos, y según se dijo el lunes tras la sesión del Ciest, ya está empezado y registra un avance de más de la mitad, aunque presenta también dificultades con derechos de vía.
Los 105 kilómetros que faltan para la terminar la conexión CdMx con el sur de Tamaulipas mediante una autopista como la que ya opera desde unos cuantos años al puerto de Tuxpan, dependen de la gestión de los diputados federales.
El proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación que presentó el gobierno federal mediante la Secretaría de Hacienda, no considera recursos para lo que falta de la modernización de la carretera de Tuxpan a Tampico.
De esta manera, la pelota está en la cancha de los representantes de Tamaulipas en la Cámara de Diputados, y con menos de 30 días para conseguirlo de acuerdo con el reloj legislativo. Se augura complicado, si se toman en cuenta los recientes sucesos relacionados con fenómenos naturales. Bueno, al menos tendrán un pretexto qué dar cuando se les pidan cuentas.