Cuando decimos que Ricardo Anaya vive en las nubes no es una broma, tampoco una parodia y, muchos menos, una metáfora.
En realidad, el jefe nacional del PAN vive viajando de México a la ciudad de Atlanta, en donde presuntamente viven los suyos: su esposa e hijos.
Lo curioso es que nadie sabe la razón por la que El Cerillo —como en el PAN motejan a Anaya— vuela puntual cada cinco días de México a Atlanta —rutina que lleva casi tres años—, y que significaría un brutal desgaste para cualquier persona.
Y es que según un reporte de Delta Airlines, Ricardo Anaya ha viajado en esa empresa un total de 121 ocasiones desde 2014 y hasta 2016, en vuelos redondos con una frecuencia de entre cinco y ocho días.
Es decir, que el jefe nacional del PAN pasa más tiempo en las nubes que el tiempo que dedica a los problemas y conflictos que vive el PAN; partido que preside desde el 21 de agosto de 2015.
Y el mejor ejemplo del gusto de Anaya por las nubes —el viaje México-Atlanta, Atlanta-México—, es que solo en los primeros 10 meses de 2016 ha realizado 71 vuelos redondos, lo que significa que dedica 14 horas semanales solo para el traslado de México a Atlanta, además de los días que pasa con la familia. ¿A qué hora preside el PAN?
Más preciso. En 40 semanas de enero a octubre de 2016, Anaya realizó 71 vuelos a Atlanta. Es decir, viaja cada cuatro días. Pero el problema no es solo el tiempo que dedica El Cerrillo a los viajes a Estados Unidos y su gusto por vivir en las nubes.
No, un problema adicional es el costo del vuelo por Delta, de México a Atlanta y de vuelta. Un promedio del precio del boleto categorías “flexible” y “Premier”, arroja un costo de 50 mil pesos por vuelo redondo.
Es decir, que en los 34 meses que Anaya ha realizado el vuelo México-Atlanta, a un costo promedio de 50 mil pesos, por los 121 vuelos realizados, la erogación por viajar a ver a su familia en todo ese tiempo es de poco más de 6 millones de pesos.
Pero si recordamos que Anaya gusta de la exclusiva clase Premier —como buen aspirante presidencial que se respete—, el costo de sus viajes en esos 34 meses habría sido cercano a 10 millones de pesos, desde 2014 hasta hoy.
Los números son aún más escandalosos si el cálculo se hace solo en los viajes realizados por Anaya en 2016, ya como presidente del PAN. Como dijimos, en los primero 10 meses de 2016 realizó 71 vuelos redondos. En todos o casi todos esos casos habría viajado en clase Premier. En esos 10 meses el costo habría sido de casi 7 millones de pesos. ¿Cuánto gana el presidente del PAN?
Otro cálculo es aún más revelador. El vuelo México-Atlanta tiene una duración de cuatro horas, en promedio. Para salir rumbo al aeropuerto y cumplir con las tres horas previas de los vuelos internacionales, son otras cuatro horas. Es decir, cada vuelo redondo consume dos día hábil de ocho horas, para el señor Anaya. Si en 2016 realizó 71 vuelos en 10 meses y si viaja cada cinco días, resulta que Anaya vive en las nubes, literalmente.
¿A qué hora atiende el señor Ricardo Anaya los graves y monumentales problemas del PAN? ¿Cuál es el estrés y el agotamiento al que se somete un viajero frecuente, como Ricardo Anaya?
Pero esa es solo una parte de las interrogantes.
¿Cuánto gana el jefe nacional del PAN, como para disponer de entre 5 y 10 millones de pesos anuales para pagar solo los vuelos que lo llevan a ver a la familia? Eso sin contar el costo de dos casas; la de México y la de Atlanta; sin contar el gasto familiar de la vida en Atlanta y en la CdMx, la renta o la venta de la casa o el departamento donde vive, los choferes, ayudantes, sirvientes, la escuela de los hijos…
También se pudo saber que con frecuencia Anaya viaja acompañado. ¿De cuanto es el salario de Ricardo Anaya en los últimos tres años para llevar ese tren de vida?
Y las preguntas fundamentales.
¿Puede aspirar a ser Presidente un político que no cree en México, que tiene a su familia fuera del país, que prefiere para los suyos la seguridad de una ciudad como Atlanta, mientras los mortales mexicanos padecen las de Caín en el día a día de México? Si no lo piensa, actúa como si dijera: ¡Que se chinguen los pobres!
¿Quién paga esa doble vida de Ricardo Anaya? ¿Con qué cara habla de honestidad y fustiga a los corruptos del PRI, del PRD y de Morena? ¿Con qué cara usa al PAN y con qué dinero financia su tren de vida y sus demenciales ambiciones de ser Presidente?
¿Cierto o no que Ricardo Anaya vive en las nubes?
Al tiempo.