El presidente estadunidense Donald Trump reveló "información altamente clasificada" al canciller ruso Serguei Lavrov y al embajador ruso en Washington, Serguei Kislyak, lo que puso en riesgo a una fuente de inteligencia, reportó hoy el diario The Washington Post.
El periódico, que cita a funcionarios y exfuncionarios en el anonimato, señaló que la información compartida por Trump con los emisarios rusos había sido entregada a Estados Unidos por un socio mediante un acuerdo de intercambio de información de inteligencia.
TE RECOMENDAMOS: “No nos llevamos bien con Rusia”, dice Trump
El acuerdo era tan sensitivo, que sus detalles no fueron compartidos con otros países, ni con ciertos sectores dentro del propio gobierno de Estados Unidos, acotó el diario.
"El socio no había dado permiso a Estados Unidos de compartir el material con Rusia, y los funcionarios dijeron que la decisión de Trump de hacerlo pone en riesgo la cooperación con un aliado que tiene acceso a las operaciones del Estado Islámico", añadió.
Trump "reveló más información al embajador ruso que la que nosotros compartimos con nuestros propios aliados, dijo una de las fuentes
La revelación coincide con el escándalo por el despido de James Comey a la dirección de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), y la aseveración del presidente Trump de que pensaba en este tema cuando decidió remover al funcionario de su cargo.
En este marco, el subprocurador de Justicia Rod Rosenstein, citado inicialmente por la Casa Blanca como promotor del despido de Comey, se presentará este jueves ante el Senado para exponer su versión de los hechos.
Rosenstein, un veterano del Departamento de Justicia que goza de buena reputación en el Congreso, testificará a puertas cerradas a las 14:30 horas, en medio de una creciente atención en círculos políticos a la investigación sobre la presunta injerencia de Rusia en las pasadas elecciones presidenciales.
Comey había recibido una invitación similar del liderazgo republicano del Senado para reunirse en privado, pero la declinó y sostuvo que sólo acudiría a una audiencia pública.
En tanto, el líder demócrata del Senado insistió en la necesidad de que la administración Trump designe a un fiscal independiente que se haga cargo de la pesquisa sobre la presunta colusión entre miembros del equipo de campaña de Trump y Rusia.
"Espero que los senadores de ambos partidos usen esta oportunidad para buscar toda la verdad sobre el despido del director Comey, para presionar al subprocurador a allanar el camino para un fiscal independiente", señaló el senador por Nueva York.
Schumer expresó asimismo su expectativa de que la administración Trump preserve y haga pública cualquier grabación que exista de conversaciones entre el presidente y el exdirector del FBI.
Aunque Trump se atribuyó la responsabilidad sobre el despido de Comey después de versiones de que Rosenstein había amenazado con renunciar al cargo, algunos republicanos se han sumado al pedido demócrata de que se hagan públicas las eventuales cintas del presidente y destituido funcionario.
Una encuesta de NBC y de The Wall Street Journal muestra que sólo 29 por ciento de los estadunidenses apoya la decisión de Trump de despedir a Comey, mientras que 53 por ciento la desaprueba.
AER