Hasta en 15 pesos se vende el litro del huachicol en Puebla debido a que a los delincuentes cada vez les cuesta más trabajo extraerlo de los ductos de Pemex, los cuales recientemente bombean menos, como parte de la estrategia del Gobierno Federal para erradicar el robo de combustible.
Algunos consumidores que prefirieron el anonimato dijeron a MILENIO PUEBLA que dicho precio se ofrece en los municipios que conforman el Triángulo Rojo, como Quecholac, Palmar de Bravo, Acatzingo, Tecamachalco y Palmar de Bravo.
Aunque en esa zona pasan muchos ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), actualmente los presuntos delincuentes no extraen tanto combustible debido a que la paraestatal cierra los ductos y suministra el hidrocarburo de otra manera.
Por lo anterior, los huachicoleros subieron los precios que casi se asemejan a los de una gasolinera, lo cual también les está costando una baja en sus ventas porque la gente prefiere acudir a los lugares establecidos.
De acuerdo a los datos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal, el precio del combustible incrementó un 123 por ciento en un año.
Señaló que el precio del huachicol pasó de 6.50 pesos por litro a 14.50 pesos de 2017 a 2018 y que se extiende en lo que va de este 2019.
Por su parte, la gasolina que se vende en establecimientos formales de Puebla ha ido disminuyendo su costo, lo cual seduce a las personas para comprarla de manera legal.
En diciembre del 2018, el precio de la gasolina diésel oscilaba entre los 19 y 20 pesos, mientras que la magna iba de los 18 a los 20 pesos, de acuerdo con datos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
En el reporte, indicó que el diésel aumentó su valor en 81% en el sexenio de Enrique Peña Nieto, ya que al inicio de su administración costaba 11.08 pesos, mientras que al mes de agosto de 2018 llegó a los 20.09 pesos por litro.
Sin embargo, actualmente el precio más barato de la gasolina Magna en la capital de Puebla es de 15.47 pesos por cada litro, mientras que la Premium su comercialización más baja es de 17.65 pesos.
Tales cifras son cinco y cuatro pesos menos, respectivamente, en comparación con el máximo histórico, según se establece en el reporte diario de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Estados del país, como Michoacán, Guanajuato y la Ciudad de México enfrentan escasez de combustible a raíz del plan que el Gobierno Federal puso en marcha para evitar la ordeña de ductos tras suspender el suministro por ductos y optar por transportar el hidrocarburo mediante pipas.
Despachadores de las gasolineras BP (British Petroleum), Repsol, Pemex, Gulf, G500, Shell y Exxon Mobil aseguraron que cuentan con el abasto suficiente para cubrir los requerimientos de los consumidores de la capital del estado. Pese a ello, los automovilistas han incrementado la adquisición de este producto ante el temor de que en Puebla se replique el desabasto que se reporta en otras entidades.
En la sucursal de la firma BP ubicada en la calzada Zavaleta casi con bulevar Atlixco, la dependiente de una de las bombas aseguró que ningún problema han reportado para atender la demanda. Tampoco les han indicado que deban de limitar o condicionar el número de litros que se pueden expender por automotor.
Aunque una automovilista que escuchó el diálogo, lamentó que en otras gasolineras se haya establecido como límite de venta diez litros por auto, aunque reconoció desconocer cuáles y dónde se localizan esos establecimientos, pues contó que eso lo escuchó en un noticiario.
"Creo que dijeron que estaba por (la colonia) Mayorazgo. No sé bien dónde, pero incluso la gente habló para denunciar a la gasolinera. No puede ser, así vamos a pasar a que vamos a tener dinero pero no vamos a poder comprar nada porque no hay", mencionó.
En tanto, en la sucursal Toledo de la paraestatal Pemex, localizada en la 19 Poniente entre 3 y 5 Sur, uno de los empleados rió y negó insistentemente con la cabeza que carezcan del combustible para su venta.
"No mi joven. Para nada. Aquí no nos ha faltado ni nos han pedido que se les ponga una cuota para la venta. Se despacha lo que nos piden. Lo que sí es que van varios que nos piden el tanque lleno y también notamos que están llegando más de los que normalmente vienen. Creo que sí hay miedo de que vaya a faltar".
Un taxista que se surtió del hidrocarburo, tras aceptar la entrevista, negó que tenga conocimiento que en otras gasolinerías haya desabasto.
"Que yo sepa, no. No. Pero si empiezan a comprar como locos entonces van a provocar que no haya. Ojalá que no pase y que se regule el abasto".
ARP