El Banco de México (Banxico) anticipó que la inflación general anual cierre 2017 en un nivel mayor al 6.63 por ciento que alcanzó en noviembre, en parte por el aumento al salario mínimo que entró en vigor este mes, de acuerdo con la minuta de su reunión de política monetaria más reciente.
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Los miembros de la Junta de Gobierno consideraron que la inflación alcanzará niveles cercanos al objetivo de 3.0 por ciento a finales de 2018 y que permanecerá alrededor de dicho nivel durante 2019.
La mayoría reconoció que el panorama para la inflación se ha tornado más complejo y uno señaló que la esperada trayectoria descendente que se esperaba para últimos meses de 2017 no se materializó.
Destacaron su tendencia alcista y consideraron entre los principales riesgos una mayor depreciación del peso provocada por las acciones de política fiscal en Estados Unidos, o por volatilidad asociada con el proceso electoral de 2018.
Indicaron que podrían presentarse presiones adicionales en los precios de algunos bienes agropecuarios y energéticos, en particular del gas LP; además de que el comportamiento de los costos unitarios de la mano de obra podría reflejarse en la inflación.
TLCAN, riesgo para crecimiento económico
En materia económica, el Banxico destacó la contracción que presentó la economía en el tercer trimestre del año, afectada por los sismos y huracanes, pero espera un repunte en el cuarto trimestre; no obstante, también considera que el balance de riesgos para el crecimiento sigue sesgado a la baja.
Esto debido, principalmente, al entorno de incertidumbre por la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que ha afectado considerablemente la inversión y es probable que sea una causa de la desaceleración del consumo.
Por otra parte, aunque los mercados financieros han presentado un comportamiento estable, no descartaron episodios de mayor volatilidad debido a la existencia de diversos riesgos, entre los que destacan cambios no anticipados de política monetaria, tanto en economías avanzadas como en algunas emergentes, o un escalamiento de los riesgos financieros.
Adicionalmente, indicó el Banxico, existe una elevada incertidumbre derivada de las tendencias proteccionistas y su posible impacto sobre el comercio internacional, además de que persisten riesgos geopolíticos en varias regiones del mundo, a los que podrían sumarse aquellos derivados de los procesos electorales que se llevarán a cabo en diversos países emergentes el próximo año.
GGA