Una mujer con instintos

Hace 25 años empezó su relación con el té en un mundo sin internet, ni apoyos financieros, pero confió en su instinto y forjó una gran empresa.

Olivia Medina de Jönsson/Euroté
Ciudad de México /

Olivia Medina de Jönsson es una mujer segura, decidida, y está al frente de Euroté una empresa que importa, mezcla, empaca y comercializa tés. Cumplió 25 años de su primer encuentro con este producto y 21 de dedicarle todos sus esfuerzos, desvelos y entusiasmos.

El preámbulo de esta historia es un comedor para ejecutivos, ahí atendía el tema de alimentos y recibía peticiones por tés que no fueran los clásicos. Buscó complacerlas, pero no encontró nada diferente en el mercado, hasta que alguien le trajo algunos del extranjero.

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Durante una visita a Suecia, encontró una pequeña tienda de tés y se dio cuenta de que eso era lo que buscaba. Regresó a México y, al quedarse sin trabajo, puso una cafetería en sociedad con sus hermanos. De nueva cuenta se encontró con el té.

Con más instinto que conocimiento, empezó a importar algunas variedades desde Alemania, para hacer mezclas del gusto de los mexicanos. Le empezó a ir bien. Su marido le sugirió confeccionar cajas de madera con algunas latitas de variedades de tés, para llevarlos a restaurantes de lujo. Las cajas abrieron otro nicho de mercado, pues la gente empezó a adquirirlas como regalo. Olivia, con ese instinto que la caracteriza, se puso a estudiar, a asistir a expos diversas. Destaca la de ANFAR, así como la Expo Café, a la cual ha asistido 19 años seguidos. La cafetería pasó a la historia. Ella, al lado de su hijo adolescente y su marido, apostó todo al té.

“Durante 3 años, fue realmente difícil, con un balanzón, pesaba cada bolsita de té”.

La empezaron a buscar de cafeterías. Siguió con la venta de las cajas como regalo, diseñó otro tipo de empaque “más elegantes y un logo más simple”.

Actualmente Euroté tiene 50 empleados; el año pasado vendió 58 toneladas de tés y está a punto de trasladar su bodega a Querétaro, para cumplir con todas las medidas de sanidad que se requieren para proceder a la exportación, el paso siguiente en la agenda de Euroté.

Olivia formó parte de la segunda generación de la aceleradora Victoria 147 y está muy satisfecha del apoyo recibido. Considera que este tipo de instancias son vitales para “acompañar al emprendedor desde el principio”.

Sin duda, Olivia es una mujer de instintos, pero también una mujer que sueña: con un México que beba más té: con la creación de una escuela donde se enseñe sobre este maravilloso producto; y que Euroté sea la referencia del producto en todo México.

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