Trump comenzó a sumar adeptos entre las filas más radicales del Partido Republicano, aprovechando un tema sumamente politizado, cuando ya consideraba la posibilidad de buscar la candidatura para las elecciones presidenciales de 2016. El papel de la humanidad en el cambio climático ha sido un tema políticamente polarizador en Estados Unidos en la última década: mientras sólo 15 por ciento de los republicanos más conservadores piensan que el cambio climático es una función de la actividad humana, esta proporción asciende al 79 por ciento de los demócratas más liberales, de acuerdo con una encuesta de Pew Research. Además, esta misma encuesta muestra que dicha polarización se extiende a las posturas sobre las causas y soluciones para el cambio climático, y en la credibilidad de los científicos climáticos y sus investigaciones.
JOS