La marca del Borrego Viudo está en disputa

El Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual revisa dos solicitudes de cesión de marca, una para Verónica Villagrana Camarena y otra para José Ricardo Macías Albor.

El establecimiento se ubica sobre la avenida Revolución, colonia Tacubaya.
Alma Paola Wong
México /

La controversia por la taquería El Borrego Viudo también involucra una disputa por la marca en el Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual (IMPI), con dos solicitudes de cesión que se ingresaron en marzo pasado.

En la base de datos de marcas del IMPI aparece registrada la marca Borrego Viudo a nombre de Conrado Villagrana Camarena, tío, ya finado, de la propietaria de los predios donde se ubica la taquería en la colonia Tacubaya. No obstante, en ese mes se presentaron dos solicitudes de cesión de marca (traspaso), una el 24 de marzo de 2017 para Verónica Villagrana Camarena, y otra el día 30 para José Ricardo Macías Albor, individuo con amplio historial en otros casos de sucesión testamentaria y disputa mercantil.

Según los documentos públicos, con número de registro 670953 ante el IMPI, la marca de El Borrego Viudo se usó por primera vez hace 40 años, en mayo de 1977. El título de registro fue expedido en 2000, con vigencia hasta 2020.

Verónica Villagrana Camarena, quien se ostenta como dueña del establecimiento, sostuvo que su padre, José Villagrana Camarena, y su tío, Conrado Villagrana, eran co-propietarios de la taquería; sin embargo, previo al fallecimiento de su tío en 2015 se le realizó la cesión de la marca. Los documentos que lo avalan, señaló Verónica, se quedaron en la oficina del negocio el pasado 12 de marzo cuando ocurrió el despojo.

En tanto, según la ley, el IMPI al dar entrada a dos solicitudes de transmisión de derechos de la marca deberá resolver por fecha de prelación, es decir, primero responderá a Verónica, en un plazo de dos a tres meses.

El IMPI no resolverá sobre la veracidad de los contratos de cesión que se anexaron en cada una de las solicitudes, por lo que de generarse una inconformidad entre los dos interesados se resolverá mediante un juez del orden civil, explicó Diego Sánchez Duro, abogado especialista en propiedad intelectual.

“Nunca había visto un expediente de esta forma, porque la ley te pide que para realizar solicitud de cesiones ante el IMPI los contratos de cesión deben ser en fechas cercanas al proceso y en ambos casos tienen mucho tiempo atrás. Aquí habrá que ver cómo lo hizo el IMPI y sobre todo ver el oficio que emita a José Ricardo, porque no es una situación cotidiana”, señaló el especialista.

Verónica Villagrana presentó un contrato de cesión fechado el 13 de noviembre de 2014.

En el caso de la solicitud presentada por José Ricardo Macías, exhibe una copia certificada con fecha del 29 de marzo de 2017, ante el corredor público Juan Enrique Aguilar Lemarroy, de un contrato de cesión de marca celebrado el 14 de agosto de 2012, en el que se testifica que el traspaso se realizó por dos millones de pesos, lo que le da a Macías Albor la titularidad de la marca.

LA OTRA VERSIÓN

Verónica Villagrana y su padre José Villagrana solo eran empleados de Conrado padre y han intentado, mediante documentos apócrifos, apropiarse de la taquería, sostuvo César Varela, abogado de Conrado Villagrana Martínez, primo de la mujer que se ostenta como la propietaria de la taquería.

En entrevista telefónica, el jurista consideró absurdo que Conrado padre decidiera dejar a su hermano y sobrina los derechos del negocio después de años de trabajo.

“Conrado (hijo) estuvo en los últimos años en Arandas cuidando el rancho y propiedades de su padre, de unos años para acá se le dio la oportunidad a Verónica, su hermano y a su padre de trabajar como empleados del señor Conrado padre, para que mejoraran su calidad de vida.

“Viene la enfermedad de Conrado padre, fallece, en ese tiempo que estuvieron como empleados tuvieron acceso a documentación, se les dio un poder para representación de pleitos y cobranzas, pero en su calidad de empleados. Nunca se cedieron derechos, en todo momento fueron empleados únicamente”, dijo.

Detalló que en Arandas, Jalisco, existe un proceso judicial contra Verónica y su padre por presunto robo, sin embargo, recalcó que el objetivo no es generar mayores conflictos, sino preservar la fuente de trabajo de los empleados.

“Verónica no demuestra que la denuncia por despojo ya se resolvió a favor de nosotros, no hay delito que perseguir toda vez que Conrado hijo es el legal y legítimo heredero, tanto de la marca, como del establecimiento y los predios”.

Cuestionado sobre la relación que existe entre Macías Albor y Conrado Villagrana, quien también se ostenta como dueño del negocio, dijo: “Es parte de la nueva administración de la mesa directiva de lo que sería El Borrego Viudo”.

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