Los restos de Paulette Gebara Farah fueron cremados en el panteón Francés, siete años después de haber sido encontrada muerta entre la base y colchón de su cama en Huixquilucan, Estado de México.
Los familiares decidieron cremar el cuerpo luego de que la Fiscalía del Estado de México determinó que el cuerpo de la menor ya no era un elemento de prueba para el caso.
La menor de edad fue reportada desaparecida por sus papás el 22 de marzo de 2010. Paulette fue encontrada muerta en su cama el 31 de marzo.
Los padres fueron investigados y arraigados tras las inconsistencias en las declaraciones. Sin embargo, días después el arraigo fue levantado y el homicidio se convirtió en una supuesta muerte cerebral.