El Bus – Bici, que plantea la creación de un carril exclusivo para ciclistas y el paso del transporte público, parece ser una fórmula riesgosa por los antecedentes que se tienen entre ambos, y aunque el proyecto que recibe el visto bueno por parte de algunas asociaciones, este podría desarrollarse con algunos pendientes por resolver, el tema de la cultura vial y la indemnización de víctimas que han perdido la vida a bordo de una bicicleta, y que en su mayoría lo han hecho en actos que involucran unidades de transporte público.
La creación de esta infraestructura no descubre el hilo negro en cuanto a la convivencia de vehículos motorizados y los no motorizados, sino que se trata de un modelo probado con éxito en otras ciudades del mundo, aunque también se trata de metrópolis con otra cultura vial, "no es una ocurrencia, es una tipología de infraestructura ciclista que en muchas partes del mundo tienen muchísimos años utilizando, y la creación de este tipo de infraestructura es muy barata de hacer y muy rápido de implementar", señaló Elton Osorio del colectivo Bici Blanca, que forma parte del Consejo Estatal de Movilidad no Motorizada.
Destacó que el proyecto de Bus Bici ha sido planeado y discutido de manera adecuada con asociaciones, con quienes cuentan con conocimientos técnicos y con quién sería el usuario común, "algo importante es que tiene restricciones, tiene que ser de un ancho mínimo como de 4.5 a casi 5 metros, esto para que permita el rebase de la bicicleta, además lleva unos cojines donde las llantas del camión pasan por en medio y lo orillan a que vaya por en medio y deje libre el carril por el lado derecho", explicó.
Aunado a ello, lo más adecuado es que los carriles Bus Bici se deben hacer en vías primarias y no en vías secundarias, por lo que desarrollarlo en las avenidas Hidalgo – República y Juárez – Vallarta, es considerada una decisión adecuada, aunque por otro lado, no se puede evitar el hecho de que la relación entre quienes compartirían dicho carril, es decir, transporte público y ciclistas, ha resultado una fórmula fatal, incluso, es el transporte público el principal involucrado en muertes de ciclistas, "el principal involucrado en las muertes de ciclistas es el transporte público con aproximadamente el 31 por ciento de los casos que representan 65 de las 207 muertes de ciclistas registradas desde 2009 a la fecha".
La tarea entonces no solo será crear infraestructura, sino de alguna manera enseñar a quienes la usarán, la manera correcta de hacerlo, para que estos carriles no se conviertan en trampas para los ciclistas y exista una armonía que hasta el momento no existe entre ambos, "por eso es bien importante que los autobuses que utilicen los carriles Bus Bici, reciban una súper capacitación los conductores, que no tengan que cobrar y manejar, abrir puertas y manejar, que tengan días de descanso", mencionó Elton Osorio.
La creación de este carril exclusivo tiene por objeto mejorar las condiciones de movilidad en la ciudad, y no convertirse en una trampa para ciclistas o un espacio que alimente la ya marcada animadversión que existe entre algunos operadores de transporte público y algunos ciclistas.
"Estaremos con un ojo muy atento en que se cumpla esto para no poner en riesgo a los ciclistas, el éxito de la infraestructura se basará en el tratamiento que se le dé a los puntos de conflicto que son los parabuses, cruces y puntos de rebase", mencionó Elthón Osorio, consciente de que en el mismo carril convergerá una especie urbana con su mayor depredador conforme lo dictan las estadísticas, el ciclista, y el camión urbano.
Una bici blanca por cada víctima
Con origen en el año 2009, el colectivo Bici Blanca nació con el objetivo de hacer visible a aquel ciclista que mientras circulaba por las calles de la ciudad pasó desapercibido, nadie lo vio y debido a eso falleció, la manera de lograrlo, fue colocar una bicicleta pintada en color blanco, a manera de memorial, justo en el punto en el que quien circulaba a bordo de dos ruedas perdiera la vida.
Su principal actividad distintiva, es la colocación de una bicicleta blanca en cada uno de los puntos en los que un ciclista perdió la vida, de ahí el nombre del colectivo que se ha convertido en bandera de este sector de la población.
La bicis memoriales son donadas, incluso la mayoría de las veces la bicicleta que es instalada en el lugar del fallecimiento de un ciclista, es precisamente la bici de quien falleció, así lo disponen familiares, "muchas veces los familiares nos dan la bici donde su familiar falleció porque quieren que sea esa la que se ponga después de que la fiscalía se las entrega", explicó Elthon Osorio.
Lo que sigue entonces, es un proceso de reparación de la bicicleta y prepararla para cubrirla de pintura en color blanco para luego instalarla en el lugar del accidente, de esa manera, no solo se puede mantener en el recuerdo a la víctima, sino que además, alertar tanto a automovilistas como a ciclistas, de que la zona ya fue escenario de un percance de fatales consecuencias, para que estimen precaución y generen conciencia de la convivencia entre auto y bici.
Bici Blanca, se convirtió poco a poco en uno de los grupos más importantes para fungir como portavoz de los ciclistas, que han enfocado sus esfuerzos en disminuir a cero la muerte de quienes circulan en este medio de transporte no motorizado en la ciudad, y con el paso del tiempo, han incrementado sus actividades y ahora realizan campañas de comunicación, concientización, colaboraciones con gobiernos, participación en consejos y campañas de educación y prevención de accidentes comunes como los llamados portazos, que se presentan cuando un automovilista abre la puerta de su unidad y ni él, ni el ciclista que va circulando, logran percatarse de la situación, que como consecuencia genera un accidente.
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SRN