A más de cinco meses del sismo magnitud 7.1, vecinos de por lo menos 10 calles de la colonia Narvarte continúan sin agua; sin embargo, en una revisión a la red hidráulica, técnicos del Sistema de Aguas de Ciudad de México (SACM) hallaron diversas válvulas cerradas, al parecer de forma intencional.
El martes y jueves pasados se reunieron vecinos y autoridades del SACM y de la delegación Benito Juárez, quienes les informaron que además de las válvulas manipuladas, hay otras que están dañadas. “No saben quién las cerró”, señalaron José Estrada y Martha Gabriela Bovadilla, habitantes afectados por la escasez de agua.
“Nos informaron que efectivamente hay un problema de líneas de abastecimiento que se han ido clausurando con el tiempo. Sobre quién lo autoriza, no lo dijeron. Están cerrando las válvulas y no saben quién fue”, acusaron los vecinos. Se buscó a las autoridades de Benito Juárez para que informaran al respecto, pero no hubo respuesta.
Uno de los afectados dijo en la reunión del martes que “son huachicoleros del agua”, y acusó que choferes de pipas extraen el líquido de tomas que hay por el rumbo.
Dicen que mientras comercian el agua a los grandes negocios, en las casas tarda en llegar.
Ante la falta de información de las autoridades, los vecinos afirman que desde que comenzaron a construir desarrollos inmobiliarios, “que tienen bombas succionadoras, el agua nos falta”.
Luego del cierre de calles que realizaron los vecinos la semana pasada en protesta por la falta del líquido, las autoridades delegacionales les han estado enviando el agua “por tandeo, es decir, a ciertas horas, pero el problema de fondo no lo han resuelto”, señalaron los afectados.