Mamás y profesionistas, difícil pero no imposible. Ambos roles pueden combinarse a la perfección y prueba de ello son Cecilia Riviello, fundadora y CEO en Balanceship Consultoría, e Irma García, directora de Emprendimiento de Alto Impacto del Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM).
Cada vez más mujeres deciden aventurarse a ser mamás y trabajar, Riviello les dice que no deben sentirse culpables nunca, “reconozcan lo maravilloso que es trabajar, realizarse, producir y ser felices. Darle este ejemplo a sus hijos es lo mejor que les puede suceder. Además, a sus hijos les tocó tener madres trabajadoras, ¡qué afortunados!”.
Tan solo el año pasado, de los 21 millones de la Población Economicamente Activa de nuestro país, 80% eran madres trabajadoras y 20% jefas de familia responsables al 100% del ingreso de su hogar, según información de ManPower. Estas mujeres día con día buscan un balance entre la maternidad y el trabajo, siempre con la premisa de llevar una vida feliz para ellas y quienes las rodean.
Con dos hijos universitarios, Cecilia Riviello siempre respetó sus horarios en la oficina y los de casa. “Cuando mis hijos eran más pequeños respetaba mis tiempos en la oficina y cuando me llevaba trabajo para terminar en casa lo hacía cuando mis hijos dormían. Respeté siempre sus tiempos de jugar, bañarlos, de llevarlos a dormir y gozaba mucho despertarlos con tiempo por la mañana. Ya mayores siempre he dedicado tiempo de calidad a cada cosa que hago”, expresó la fundadora de Balanceship.
Ella continúa disfrutando el tiempo con su familia y en la consultoría que dirige, un espacio que tiene por objetivo desarrollar y coachear equipos de alto rendimiento, planeación estratégica, institucionalización de negocios familiares y coaching individual de líderes.
Mientras que Irma García, de INADEM, con un hijo de ocho años, dice que lo importante es compartir día a día (por poco que sea el tiempo) las satisfacciones, enseñanzas y retos con la familia. “Esto también lo llevo a mi trabajo, el lado humano, siempre dicen que soy la mamá del equipo, en virtud de que pasamos mucho tiempo en la oficina esta se vuelve también parte de mi familia”, dice.
Irma destaca lo complicado de compartir "tiempo físico” al llevar estos dos roles, por lo que recomienda el contacto telefónico como aliado; “si se está en casa, lo ideal es mantener contacto telefónico en todo momento con el equipo de trabajo y viceversa”.
¿Cómo han logrado estas mujeres llevar su trayectoria profesional por años sin descuidar a su familia? Ellas lo explican: