Los santuarios abren sus puertas, ¡vive la magia!

Este sábado 19 de noviembre, el santuario de Michoacán abre sus puertas; Estado de México, el 23. Los visitantes no deben ir solos a los santuarios, deben acudir acompañados de guías especializados.

Los santuarios de Michoacán abren este sábado 19; en el Estado de México se podrán visitar a partir del 26.
Los santuarios estarán abiertos a partir de este sábado en Michoacán y el 26 en el Estado de México.
David Segoviano
Ciudad de México /

El aleteo de millones de mariposas Monarca ya inunda la Reserva de la Biósfera. Los santuarios de Michoacán, El Rosario, en el Municipio de Ocampo, y Cerro Prieto, en Angangueo, abrirán sus puertas este sábado 19 de noviembre, una vez que las colonias estén instaladas en sus áreas de hibernación.

En el Estado de México, El Capulín, en Donato Guerra, y el ejido La Mesa, en el municipio de San José del Rincón, empezarán a recibir a los turistas el 23 de noviembre, pues las mariposas tardan más en llegar en instalarse. Los visitantes podrán vivir la experiencia hasta finales de marzo, cuando inicie la migración al norte.

Si en la temporada 2015-2016 los santuarios michoacanos recibieron una afluencia histórica de más de 200 mil visitantes, este año se espera un crecimiento de 10 por ciento, hasta los 220 mil turistas (incluidos 15 mil extranjeros), de los cuales 160 mil arribarán a El Rosario, el santuario de mariposas Monarca más grande.

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Tras vivir una fiesta de más de cinco mil personas, desfile incluido, para dar la bienvenida a las mariposas y celebrar el inicio de la temporada turística, el ejido se declaró listo para la temporada. Este año, luego de una fuerte nevada que mató millones de mariposas a finales de marzo y dañó miles de árboles, los ejidatarios se dieron a la tarea de reforestar la zona, para lo que plantaron alrededor de 300 mil árboles.

Con ello no solo contribuyen a fortalecer el hábitat de las Monarca, sino que brindan su mejor rostro a los visitantes, cuya derrama económica es vital para las familias del ejido, que ofrecen visitas guiadas (se deben recorrer 1.6 kilómetros hasta las colonias), venta de souvenirs, artesanías y comida típica de la región.

Por su parte, el santuario de Cerro Prieto, en Angangueo ofrece adicionalmente recorridos a caballo, pues la distancia desde la población a la zona de hibernación va de 2.1 a 3.5 kilómetros. También El Capulín, en el Estado de México, renta caballos para recorrer los 4 kilómetros que hay hasta donde se ubican las mariposas. Tanto este santuario como el de La Mesa cuentan con cabañas rústicas a precios accesibles.

Para visitar los santuarios puede viajarse en automóvil o autobús desde la Ciudad de México, Toluca y Morelia.

Además, hay operadores turísticos que ofrecen paquetes desde estas tres ciudades, con transporte, recorrido en la zona y alimentos.

Así, a partir de este fin de semana puedes vivir la magia de uno de los fenómenos más espectaculares del reino animal.

Respétalas, cuídalas y… regresa pronto

Si bien la temporada de visita en los santuarios inicia desde este fin de semana, los pobladores de los ejidos donde las mariposas Monarca realizan su ancestral temporada de hibernación recomiendan elegir un día soleado, pues es cuando los ejemplares deciden dejar sus árboles para buscar flores y agua.

A su vez, Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por su sigla en inglés), de México, y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), han emitido algunas recomendaciones para que los turistas disfruten su visita y cuiden los santuarios y las colonias de las Monarca.

En primera, hacen énfasis en que los visitantes no deben llevarse mariposas, ni vivas ni muertas. Además, no deben portarse aparatos de sonido para no perturbarlas, ni dejar basura.

Para vivir mejor la experiencia, es importante usar zapatos cómodos, pues es zona boscosa y montañosa y se tienen que hacer largos recorridos a pie, y se debe ir bien abrigado.

Los visitantes no deben aventurarse solos hacia los santuarios, sino que deben acudir acompañados de guías especializados y acatar las disposiciones que dicten los ejidatarios.

En años anteriores, el número de mariposas Monarca que llegaron a los santuarios disminuyó dramáticamente, pero gracias a redes de apoyo desde Canadá hasta México, que incluyen empresas, gobiernos, pobladores, organismos e instituciones de investigación científica, se han logrado recuperar paulatinamente las colonias, por lo que es clave respetar su hábitat y a las propias mariposas para seguir disfrutando de la experiencia.


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