Irene Vallejo anuncia el tema de su siguiente libro

La autora escribe un ensayo sobre los cuidados a los demás y cómo sostienen y cimentan a las sociedades

Irene Vallejo da a conocer cuál será el tema de su nuevo libro | Especial
Ciudad de México /

Los cuidados a los demás es el tema del ensayo en que Irene Vallejo trabaja después del éxito de El infinito en un junco.


“Será el asunto central de mi próximo ensayo. Cómo los cuidados sostienen y cimentan las sociedades en las que vivimos y cómo, por desgracia, muchas veces permanecen en una penumbra donde no se valora esa aportación, se la relega al mundo de lo femenino y de lo doméstico y no se entiende hasta qué punto es también un aspecto esencial del humanismo entender el cuidado en el seno de la familia, de los seres queridos, atender la fragilidad, la enfermedad, la discapacidad y todos esos aspectos de la vida que hablan de la vulnerabilidad, pero también de la inmensa capacidad humana para sanar y para encontrar en lo colectivo fuerzas que nos sustentan y nos hacen comunidades más unidas”.

Vallejo dio la noticia en el evento donde la anunciaron como ganadora del Premio Nuevo León Alfonso Reyes, en el que participó vía remota desde España y donde dijo que viajará a Nuevo León a recibirlo en el último trimestre del año.


La escritora comentó que el conocimiento, “la cultura, la lectura nos ofrecen ese refugio que supone sentirnos parte de un grupo amplio, sediento de conocimiento, de conversación, de debate. Y me encanta que el planteamiento sea precisamente los encuentros con estudiantes universitarios, con la población de Monterrey y crear ese momento de intercambio de cultura y enriquecimiento recíproco”.

Y agregó: “Me fascina la idea de visitar Nuevo León y reencontrarme con los rostros, las vertientes culturales de este país inagotable que es México y sobre todo la patria natal de Alfonso Reyes, a quien tanto he leído y aprendido desde mis estudios universitarios en Zaragoza, donde los profesores nos recomendaban leerlo; buscar en él también los argumentos y las razones para defender la necesidad de estudiar y profundizar en las tradiciones clásicas dentro de este mundo contemporáneo, vertiginoso y tecnológico. Y creo que nadie como Alfonso Reyes encarna la comprensión de que no hay ninguna contradicción entre esos dos extremos y todo lo contrario, las humanidades enriquecen las posibilidades y las puertas que abren las tecnologías. Para mí Monterrey tiene ese atractivo especial, ceremonial de recorrer los lugares, los pasos de Alfonso Reyes y las universidades. Lo espero con auténtica impaciencia, expectativa y alegría”.

Para las nuevas generaciones

Durante la charla, la columnista de MILENIO Diario y colaboradora de su suplemento cultural Laberinto habló sobre los retos de estimular la lectura entre las nuevas generaciones.

“Yo reconozco que soy una persona optimista y que siento una gran confianza en las nuevas generaciones. Oigo constantemente cómo se repite la idea de que los jóvenes no leen y, sin embargo, yo veo cómo las ferias del libro rebosan año tras año presencia de jóvenes lectores; hay entusiasmos, transformaciones en la lectura, que además son capaces de aunar el uso de las redes sociales con la promoción de los libros. Yo percibo que hay ambición en la forma en la que los jóvenes también leen y se acercan a la lectura”.

Para ella, la puerta de entrada a la lectura es la curiosidad y el placer: “Creo que hay que fomentar esa curiosidad a través del diálogo, el debate, la lectura acompañada y estimulada, como se hace en los clubes de lectura. Creo que las instituciones educativas tienen allí un gran papel en el fomento de la lectura, no sólo a través de los planes de estudio, sino a través de todas las actividades culturales que puedan organizar, las ferias del libro, los encuentros con escritores, conferencias.

“También son extraordinariamente importantes las bibliotecas públicas que abren la puerta de los libros a aquellos que tal vez en sus casas no tienen la suerte de disponer de colecciones ricas de libros o que no se los pueden permitir. Entonces, hay allí toda una constelación de actividades y posibilidades que van fomentando el acceso a la lectura, la conversación sobre los libros y la incorporación de esa lectura a la vida intelectual”.
Irene Vallejo en la FIL Guadalajara 2024. (Foto: Ariel Ojeda)


En el encuentro, se le preguntó sobre el legado del ensayo como parte importante de la humanidad, a lo que respondió:

“Sí, he reivindicado especialmente el género del ensayo, porque creo que es esencial que se abra a una pluralidad de voces, de puntos de vista, por supuesto personales, pero también geográficos, a todas las problemáticas planetarias que no son las mismas en un continente o en otro, en el norte o en el sur, en las distintas regiones.

“Y para que realmente el ensayo traduzca la variedad y la diversidad del mundo, es necesario que sea especialmente hospitalario a todas las voces. Y esto, por desgracia, no está sucediendo después de todos estos años que he dedicado a viajar por los distintos países en los que se ha traducido mi libro.

“He percibido que faltan presencias, voces, países, diversidad en la elaboración del pensamiento. Y eso es algo que creo que es esencial insistir, y por eso invitar a que estudiantes, académicos, escritores, literatas de todo el mundo aporten esa visión y esa mirada que nos enriquece a todos y que además favorece ese diálogo que parte como premisa de una comprensión del punto de vista ajeno”.

Temas en común

Se le cuestionó sobre si existe un tema o varios que comparten la sociedad mexicana con la española.

“El tema de El infinito en un junco era, por supuesto, la historia y la peripecia de los libros, que es un tema universal, puesto que afecta e involucra a todas las culturas. Pero un aspecto que, sorprendentemente para mí, despertó la especial respuesta emocional en México fue la cuestión de las metáforas que unen la escritura, la creación y el textil. Allí es donde yo explico que texto y textil tienen el mismo origen y todas las metáforas de la creación literaria que emparentan con el mundo de los telares, de las ruecas, del acto de coser, de tejer”.

Irene Vallejo reveló que ese tema tuvo una especial respuesta porque conecta con unas tradiciones muy profundas en México “donde las mujeres han expresado sus culturas a través del trabajo con el hilo, el bordado y el lenguaje del textil, que también es una forma de expresarse. Y creo que trenzar esas dos formas de cultura, una que quizá ha recibido más prestigio y apoyo por parte de la crítica durante tanto tiempo, con otras formas más íntimas, autóctonas y originarias de también narrar la visión y la mirada sobre el mundo, despertó en mí un gran interés por toda la cultura mexicana y entendí que allí había un hilo que nos unía, nunca mejor dicho, y que realmente hay muchos lenguajes y formas de expresión que todavía necesitan ser consideradas en su enorme profundidad conceptual, creativa y artística.

“Más allá de eso, hay profundas sintonías entre los temas que creo que a mí me interesan como española y que encontrarían un eco en la cultura mexicana, como el exilio o la migración que ahora nos atraviesa”, concluyó.


  • Vicente Gutiérrez
  • vicente.gutierrez@milenio.com
  • Periodista desde hace 25 años y especialista en temas culturales, la industria del entretenimiento y cinematográfica. Por su experiencia y conocimiento, también ha participado en temas de política y de negocios. Es reportero de cultura en Milenio y locutor en “La Taquilla”, programa de Radio Fórmula 104.1 FM.

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.