El partido entre el Montpellier y el Saint Etienne, de la vigésima sexta jornada de la Ligue 1 , ha sido suspendido a falta de media hora y cuando los visitantes ganaban por 0-2, debido a los graves incidentes sucedidos en las gradas del estadio de la Mosson.
Los sucesos ocurrieron en el minuto 63, después de que los ultras del conjunto local, colista de la Ligue 1, lanzaran bengalas al césped y prendieran fuego en una parte de la tribuna. Numerosos asientos, además, fueron arrancados de su sitio y arrojados desde la grada.
El árbitro del encuentro, Francois Letexier, envió a ambos equipos a los vestuarios dada la gravedad de la situación, con fuego en las gradas y un llamativo humo provocado por los aficionados radicales del Montpellier.
En un principio la suspensión fue provisional, pero después, por razones de seguridad, las autoridades decidieron que la cancelación fuera definitiva.
En el momento de los incidentes que llevaron a la suspensión del partido, el Saint Etienne ganaba por 0-2 gracias a un doblete de Lucas Stassin, que abrió el marcador a los once minutos y lo amplió en el 53, cuando los verdes estaban con un jugador menos por la expulsión, por doble amarilla, de Maxime Bernauer al borde del descanso.
El duelo del estadio de la Mosson es clave por la permanencia. El Montpellier es colista, a seis puntos del antepenúltimo, el Le Havre, en promoción, y ocho del Reims, que marca la salvación. El Saint Etienne es penúltimo, con cinco de ventaja sobre su rival y a uno del Le Havre y tres del Reims.
CIG