La biznaga burra, cactacea presente en regiones de Coahuila y Durango, está en peligro de extinción por la extracción, afirmó Jorge Madrazo Fanti, biólogo y divulgador del Museo del Desierto de Saltillo.
En entrevista para MILENIO detalló que la demanda como planta ornamental en los hogares, además de ser considerada como ingrediente en la elaboración de dulces y platillos de la cocina mexicana, han puesto en riesgo esta “maravillosa cactacea.
Platillos como los chiles en nogada, la rosca de reyes, o dulces cristalizados y el acitrón, han causado un impacto en la población de biznagas, las cuales tardan hasta 15 años en alcanzar su madurez reproductiva.
El saqueo
Madrazo Fanti advirtió que las poblaciones que hay en diversas regiones de Coahuila, y una pequeña porción en Durango, están en peligro por el saqueo.
“Hay un mercado negro donde se tráfica con estas especies de cactaceas y han mermado las poblaciones, y esta en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN)”
Puntualizó que la biznaga burra está en esta lista desde el 29 de abril de 2009 y a pesar de los esfuerzos su población sigue en decrecimiento, por lo que tiene una etiqueta de casi amenazado.
“Es una especie casi amenazada, ya está muy desactualizada esta investigación y se podría decir que actualmente ya está amenazada o en peligro de extinción”.
El biólogo afirmó que la norma oficial mexicana de la Semarnat, 059-2010, tiene catalogada a la biznaga como una especie en peligro de extinción.
Por lo que es necesario una concientización para atender este foco rojo en el medio ambiente y el ecosistema coahuilense.
Invasión de espacios
El divulgador cientifico puntualizó que con la pandemia por Covid-19 llevó a las personas a realizar actividades como el senderismo en zonas naturales, que también aumentó el saqueó de esta y otras especies.
“Si estas personas no tienen la cultura de cuidar los espacios que visitan, tenemos un grave problema, porque ven un animalito, una planta, una piedra y todo quieren llevarse, pero esto no se debe de hacer”.
Explicó que realizar estas actividades en la naturaleza no tiene nada de malo, pero deben crear una consciencia de conservación “y visitar estos lugares debe ser como visitar un templo”.
“Una biznaga de más de 200 años es un monumento a la resistencia en la vida para expresarse y aferrarse a los climas y lugares más inhóspitos”.
Enfatizó que estos entornos naturales no se deben alterar, se deben conservar, observar, tomar fotografías para el recuerdo, “pero se deben mantener intactos”.
Tradiciones culinarias
Expuso que también hay tradiciones culinarias donde se aprovechaba la carnosidad de la biznaga para elaborar dulces y platillos típicos.
“Antes no era un impacto tan potente sobre las poblaciones silvestres, pero se comenzó a popularizar y empezó la sobreexplotación fuerte”.
Destacó que es importante concientizar a la población sobre el impacto que tiene el cortar una biznaga que tiene 20, 50 o hasta 100 años.
Características
“La Biznaga Burra, es un cactacea muy hermosa, tallo globular como si fuera un cilindro, puede alcanzar los dos metros de altitud, en especies muy viejas, tiene 30 costillas, muy robusta con diámetros de 50 o 60 centímetros, con lanocidades donde aparecen flores doradas que atrae a diferentes polinizadores y alimenta a los insectos que forman parte de este ecosistema”.
Detalló que en su experiencia, estudiando y produciendo la biznaga en el vivero del Museo del Desierto, una de estas cactaceas alcanza su madurez reproductiva entre los 12 y 15 años.
“Son de lento crecimiento, así han evolucionado, porque en el desierto hay poca agua, una luz excesiva al igual que el calor, esta es una de las adaptaciones es el lento crecimiento”.
Puntualizó que hay biznagas de 15 años que no han tenido su primera flor y esto les dificulta reproducirse rapidamente.
Destacó que las poblaciones más grandes de se pueden encontrar al sur del Desierto Chihuahense, en el estado de Coahuila.
“Por eso es importante conservar las poblaciones donde hay biznagas de más de 30 años, para que las personas las conozcan y evitar el saqueo”.
Una joya en peligro
El especialista enfatizó que las cactaceas son “una joya de México” y el saqueo impacta directamente en las poblaciones corriendo el riesgo de que las biznagas desaparezcan del entorno natural.
Mencionó que hay opciones que son una alternativa, las Unidades de Manejo Ambiental que producen con invernaderos estas especies, entre ellas la biznaga burra, sin que represente un impacto ambiental.
“Esto propicia la conservación de la especie, el ecosistema tiene sus poblaciones, donde los polinizadores tendrán su alimento y podrán mantener el ecosistema, y los clientes tienen su planta de procedencia legal, en su casa para embellecer su casa o su jardín”.
Conservación
El divulgador del Museo del Desierto de Saltillo, afirmó que ellos cuentan con uno de los puntos donde se puede adquirir una de estas cactaceas, entre otras, de forma totalmente legal.
“Hay permiso de Semarnat, Profepa, para la comercialización, aquí en el vivero tenemos todo en regla para producirlas”.
Hizo una invitación a conservar las áreas naturales protegidas de Coahuila, Durango y del país para que siga la conservación.
“Es muy difícil que solamente el gobierno pueda proteger a estas especies, se necesita de una cultura de conservación, pero también de denuncia a quienes destruyen o extraen las especies”.
ACA