Ésta es la serie que todo México tiene que ver. Se llama “Los años heridos” y se estrena mañana sábado 28 de septiembre a las 20:30, de manera simultánea, en El Once y Capital 21.
Sólo van a ser dos capítulos de hora y media. El segundo episodio se va a lanzar el sábado 5 de octubre exactamente a la misma hora y bajo el mismo esquema de transmisión.
¿Como por qué habría que ver esto teniendo tantas opciones tan buenas en tantos canales, redes y plataformas?
Porque es la historia de nuestras vidas, el secreto más oscuro de nuestros ancestros, esa parte de la historia de México que nadie se había atrevido a contar así, como las mejores series del mundo.
“Los años heridos” le va a encantar a las nuevas generaciones, a las que no saben nada, pero también a las de más de 40 años, a las que se asustan cada vez que escuchan la palabra comunista, a las que vivieron en el engaño.
Ésta es la historia de la guerra sucia, de la represión, las persecuciones, la tortura y la desaparición de miles de mexicanas y mexicanos entre los años 60 y 70.
Nunca nadie había tenido el valor de hacer algo así en nuestro país. Es como las maravillosas películas argentinas que narran las historias de la dictadura, pero mil veces más fuerte porque es México, nuestro México, ése donde se supone que estas cosas no pasaban.
Por favor no se vaya a imaginar un mamotreto ideológico insoportable. La gente que está detrás de esto fue muy sabia e, inspirándose en el libro del mismo nombre de Fritz Glockner, creó un drama muy humano, que conecta, que funciona.
No le voy a vender trama para no arruinarle todo lo que necesariamente va a vivir cuando esté frente a este material pero es la historia personal de una chica universitaria en la actualidad. Punto.
Ella se entera de cosas que no sabía y comienza a hacer un viaje tan apasionante como el de las mejores protagonistas de las más populares películas nacionales e internacionales que tenemos en cartelera.
Por tanto, “Los años heridos” es una experiencia entretenida y está tan bien hecha que, de una forma particularmente ingeniosa, intercala narraciones, animaciones y hasta entrevistas con fuentes autorizadas para construir un documento único en la historia de la televisión pública nacional.
Esto va tan en serio que el reparto está integrado por Socorro Bonilla (“La vida conyugal”), Esteban Soberanes (“El callejón de los milagros”), Humberto Busto (“Tengo que morir todas las noches”) y Kristyan Ferrer (“Guten tag, Ramón”), entre muchas otras actrices y muchos otros actores ganadores y nominados al Ariel, y jóvenes promesas como Val Dorantes (“Ella camina sola”).
Tuve el gran honor de ver esto con anticipación y sigo profundamente conmovido.
Se suponía que los medios públicos, hoy, como estaban condenados a vivir en la “austeridad republicana”, no eran capaces de producir algo tan caro como una serie con actores.
¡Oh, sorpresa! Sí se pudo y no sólo eso, se pudo justo antes del cierre del sexenio de Andrés Manuel López Obrador mandando un mensaje de cambio total en la televisión pública mexicana.
AMLO se puede ir feliz también con esto. Si alguien tenía ganas de atacarlo por no haber producido series, ya no va a poder y, peor tantito, ya no va a tener cara para reclamar nada porque ésta es una serie que además de cumplir con todos los requisitos cinematográficos de la industria, rompe esquemas en la televisión abierta nacional.
Sí es importante verla, disfrutarla y, después comentarla. A mí me dieron ganas de llorar, de platicar con mis padres. Eran tantas y tan monstruosas las cosas que no me dijeron.
¿Pero sabe qué fue lo mejor de todo? Que cuando terminé de observar esta propuesta, entendí, me liberé, sané y aprecié. Aunque suene a lugar común: me cambió la vida.
¡Gracias a todos en Gravedad Cero Films, El Once y Capital 21 por abrirme los ojos! ¡Gracias a todos los productores, directores, escritores, técnicos y actores que hicieron posible esto! Necesitaba algo así.
Luche con todas sus fuerzas por ver “Los años heridos”. Le va a gustar. De veras que sí.