¿Qué haría usted si fuera una persona con discapacidad y tuviera la oportunidad de volverse como los demás?
Fíjese lo que le estoy preguntando. Es muy fuerte.
¿Renunciaría a su vida a cambio de otra? ¿Borraría todo lo que ha logrado con tal de ser como todos?
El miércoles 18 de septiembre tuve el honor de que me invitaran a Papalote Museo del Niño a la presentación de un cortometraje documental.
Yo, como siempre que voy a este tipo de presentaciones, iba preparado para todo menos para ver mujeres, para ver hombres, con discapacidad afirmando con la más profunda honestidad: “No lo cambiaría”.
Ellas y ellos no renunciarían a su vida a cambio de otra. Ellas y ellos no borrarían todo lo que han logrado con tal de ser como todos.
Esto es el triunfo de la inclusión. Es un nivel de realidad que jamás soñé con ver. ¡Es lo máximo!
¿Qué es lo que está pasando aquí? La combinación de un montón de maravillas históricas.
Venimos de los Juegos Paralímpicos de París 2024 donde nuestros atletas nos volvieron a llenar de orgullo.
Teletón, nuestro amado Teletón, es una instancia que lleva más de 25 años luchando por las personas con discapacidad.
¡Y qué cree! 40 por ciento de las medallas que nuestros atletas obtuvieron en París, vienen de mujeres y de hombres atendidos en nuestros CRITs, “egresados” de Teletón.
Obviamente ésta es una noticia inmensa, un logro indiscutible, la prueba de que cuando usted y yo donamos al Teletón, no sólo apoyamos lo que creemos que estamos apoyando.
Somos capaces de llevar a esas personas a la cima, de crear superhéroes, de ver a nuestras niñas y a nuestros niños con discapacidad crecer hasta convertirse en medallistas paralímpicos.
¿Y qué pasó con el otro 60 por ciento? Que Teletón es muy joven y, por tiempo o distancia, no les tocó pero, ojo, eso no significa que la fundación les dé la espalda.
En ese evento de Papalote, Fernando Landeros, Presidente de Fundación Teletón, anunció atención de por vida a esas glorias del deporte paralímpico mexicano.
¿Y qué tiene que ver esto con lo que le pregunté al principio de esta columna?
Que Mario Muñoz, el cineasta responsable de joyas como “Bajo la sal”, durante la pandemia, hizo un cortometraje documental con atletas paralímpicos.
Ese corto se llama “No lo cambiaría”. Fue el que se presentó esa noche. Ahí es donde se dice lo que ya lo comenté y mucho más.
Es una de esas experiencias que nadie se debe perder porque ahí, como en pocas partes, nos podemos inspirar, inspirar a otros y entender lo mucho que ha cambiado México gracias a Teletón.
Cinematográficamente, “No lo cambiaría” es una exquisitez. No hay manera de verlo y de no caer rendido ante la belleza de sus imágenes, ante el cuidado de sus sonidos.
Pero lo más importante está en el contenido, en las cosas que hacen y que dicen quienes salen ahí y que rompen, por completo, con las melodramáticas narrativas sobre la discapacidad que teníamos antes.
Es más, cuando uno lo está viendo, tarda en entrar a eso porque el eje del contenido es otro.
Yo no sé si “No lo cambiaría” vaya a competir en DocsMX, en el Ariel o en los Emmys Internacionales. Lo que sí sé es que es un gran material que usted puede ver ya, gratis, en el canal de YouTube de Teletón México.
¡Son menos de diez minutos! Y si le sobra un poco más de tiempo, hasta podría ver el evento de Papalote conducido por Rodrigo Murray, Ana Caty Hernández y Enrique Burak, que está ahí mismo.
¡Qué experiencia tan más enriquecedora! ¡Qué manera de cambiar las cosas! ¡Felicidades! ¡Y gloria eterna para nuestros atletas paralímpicos! ¡Gracias por todo! ¡Gracias por tanto!
Luche con todas sus fuerzas por ver ya, pero ya, “No lo cambiaría” en YouTube. Le va a gustar. De veras que sí.