Por un complejísimo tema de usos horarios, mercados globales, trascendencia y derechos, ayer martes 22 de abril, a las 19:00, tiempo de México, se estrenó la segunda y última temporada de “Andor” en Disney+.
Hoy miércoles 23, todo el mundo la tiene a su disposición y los “spoilers” pululan en las redes sociales.
Yo lo único que le voy a decir es que estamos hablando de la mejor serie del universo “Star Wars”.
¿Cómo es posible que me atreva a hacer esta afirmación cuando Lucasfilm Ltd. nos ha regalado maravillosos fenómenos como “The Mandalorian”?
Porque “Andor” apela al origen de todo esto. Es la raíz.
Y si “Rogue One” embona a la perfección con la primera película que se hizo de esta franquicia en 1977, “Andor” termina embonando de una manera todavía más perfecta con “Rogue One”.
Por tanto, “Andor” es algo así como la raíz de la raíz, el ADN de “Star Wars”.
Ojo: ésta no es mi crítica a “Andor 2”. Por el mismo tema de los usos horarios, los mercados globales, la trascendencia y los derechos, mi crítica vendrá después.
Ésta son mis “instrucciones” para que usted se entregue a este material y lo goce. Para que sea feliz. Por favor, atrévase a ser feliz.
¿Qué es lo que pasa aquí? Que Tony Gilroy, el escritor de esta serie, en verdad ama, respeta y entiende “Star Wars”.
No es casualidad que él haya escrito “Rogue One”. No es casualidad que toda la belleza que millones de personas encontraron en aquella película de 2016 esté aquí potenciada por las posibilidades que da desarrollar una serie.
La nota, para nosotros como mexicanas y como mexicanos, siempre ha sido y será que el gran protagonista de “Andor” es Diego Luna.
Ver a un paisano en “Star Wars” es lo máximo, pero verlo triunfando, pero verlo recibiendo elogios, pero verlo recibiendo tanto amor del fandom más exigente de los cinco continentes, es mil veces más satisfactorio.
Porque, vamos a decirnos la verdad, las admiradoras y los admiradores de “Star Wars” son muy rudos y han hecho pedazos cualquier cantidad de títulos y cualquier cantidad de participaciones.
A Diego lo adoran. ¡Y cómo no, si lo hace increíble! Si no me cree, compare su trabajo aquí contra lo que le hemos visto en otras series como “La Máquina” o “Narcos: México”.
¡Nada qué ver! Otro tono. Otro manejo físico. Otro manejo de la verdad. Diego es el actor de la verdad y darle verdad a un personaje de algo tan de fantasía como “Star Wars” es algo que muy pocas celebridades pueden presumir. Pregúntele a Harrison Ford.
Así de estupenda es la actuación de Diego Luna en esta superproducción.
En el muy remoto caso de que usted no haya visto nada o de que no haya terminado de ver la temporada uno de “Andor”, ¿qué aplica?
Mire: aquí sólo hay de dos sopas. O la comienza a ver desde un principio o empieza directamente con la temporada dos.
Los genios de Disney+ son tan generosos que, obviamente, tienen un resumen para ubicar en la historia a propios y extraños. El caso es que no se la puede perder.
Yo siento una devoción muy especial por “Andor” porque se nota que se hizo con amor, desde los libretos hasta la corrección de color, porque sí es una historia que merece llamarse de “Star Wars” y por dos asuntos más.
Uno: es madura. Los conflictos que se tocan son serios. Las audiencias son tratadas como entidades inteligentes, con respeto. ¡Gracias!
Y dos: es social. La lectura política de “Andor” no se parece a nada de todo lo que se ha hecho de “Star Wars” desde los tiempos de George Lucas.
Su mensaje de rebeldía es un golpe al sistema nervioso. Sus advertencias sobre lo que pudiera pasar si seguimos pasmados ante “el imperio” duelen porque aplican para muchas situaciones que todo el planeta está viviendo. ¿Así o más importante?
A esto súmele una producción plagada de valores, de derroche, de profesionalismo.
Luche por ver ya, pero ya, la segunda temporada de “Andor” en Disney+.
Va a subir a un ritmo de tres capítulos por semana hasta completar 12 porque cada uno de estos bloques vale como la mejor de las miniseries.
De hecho, cada uno de estos bloques tiene a su propio director incluyendo, más adelante, a nuestro mexicanísimo Alonso Ruizpalacios de “Güeros”, “Una película de policías” y “La cocina”.
¡Un mexicano dirigiendo “Star Wars”! ¡Un mexicano dirigiendo a un mexicano en “Star Wars”! ¿Puede haber un acontecimiento más grande que éste? Le va a gustar. De veras que sí.