Hace un par de días, en medio de una plática con una ejecutiva de RRHH de una empresa, surgió un cuestionamiento que considero típico de la cultura organizacional: cómo hacer que todos se sientan pertenecidos.
“Esta película ya la vi”, me dije. Entonces le pregunté, “¿qué significa para ti que todos se sientan pertenecidos?” Y ella comenzó a darme argumentos relacionados con liderazgo, visión, compromiso… “Sí, esta historia ya la conozco”, confirmé.
Creo que, a nivel organizacional, es fundamental entender que, por más dinámicas, actividades o programas de integración que se realicen, habrá personas que simplemente no demostrarán ánimo en participar. ¿Por qué? Porque no están motivadas adecuadamente.
Y aquí quiero destacar la pregunta que hice: qué significa. Si la respuesta va en el sentido de que todos sientan pasión por la empresa, cualquier estrategia terminará mal.
Pero, si va en el sentido de que manifiesten cierto nivel de empatía, entonces estamos siendo realistas, ya que cada integrante tiene su sistema de creencias que filtra la motivación recibida, y ese no lo podrás cambiar fácilmente.
Entonces, te propongo tres alternativas para establecer objetivos en tu programa de pertenencia.
Primero, participación; retoma la idea del kínder, donde el enfoque principal es jugar, divertirse, romper la inercia.
Segundo, identificación; con base en los valores clave, y de manera escalonada, convoca a participar en actividades que confirmen ciertos compromisos: rescate y cuidado del medio ambiente, alfabetización, etc.
Tercero, apropiación; da espacios y oportunidades para que ciertas personas, motu proprio, se involucren más en actividades que resuenan a nivel personal: clubes de arte, cultura y deportes, brigadas de apoyo y vinculación social, etc.
Sí, ya sé qué vas a decir: “Pero entonces, ¿no todos estarán en la misma sintonía?” No, ¿pero para qué quieres a todos iguales? ¿Quién eres, el ejército?
¿Quieres a todos actuando como en tabla gimnastica? La estandarización forzada provoca deserción, ojo con eso.
Dar alternativas te permitirá detectar liderazgos que, con su propio estilo, podrán ayudarte a mejorar el clima laboral. Entonces, échale una pensada, revisa el plan de RRHH, y si te cuadra lo que digo, haz ajustes, y chance algo mejora. Yo digo.