Que obviamente cayó como bomba el operativo “Enjambre” donde quedó claro para los criminales y sus funcionarios aliados que ya se acabaron los abrazos. Las mesas para la construcción de la paz que impulsa la gobernadora Delfina Gómez, reiterando su política de cero impunidad, fueron el semillero de las investigaciones y la coordinación contundente entre las instancias mexiquenses como la Secretaría de Seguridad que encabeza Cristóbal Castañeda y la Fiscalía estatal, a cargo de José Luis Cervantes, con las corporaciones federales.
Que por cierto, ayer por la mañana el Fiscal Cervantes acudió a la Conferencia Nacional de Procuradores y Fiscales que preside el titular de la FGR, Alejandro Gertz, y en la que participó el Secretario de Seguridad, Omar García Harfuch. ¿Será que ahí se comentó en corto del banderazo de salida? Y es que de la federación participaron “nada más” mil 500 elementos.
Que el resultado, ya se sabe, fueron las detenciones de mandos policiacos municipales ligados a la delincuencia y hasta de la alcaldesa de Amanalco, María Elena Martínez, que quizá fue de las principales sorpresas. Se le recuerda por su agresivo conflicto con el síndico una vez que ella decidió abandonar Movimiento Ciudadano, partido que llevó a ambos al poder local, y decidió unirse a Morena, lo que por cierto deja claro que la administración morenista estatal no tendrá miramientos contra la narcopolítica, de cualquier color.
Pero haciendo memoria resulta irónico que la alcaldesa, recién llegada al cargo, solicitara al entonces mandatario Alfredo Del Mazo “la implementación de una estrategia real de seguridad, no solo el aumento de elementos y patrullas, sino que se le ponga inteligencia”. Todo lo que puede cambiar en un trienio.
Que otro detalle de relevancia fue que el detenido presidente del DIF de Tonatico, Ellery Guadalupe F., es esposo de la alcaldesa Marlem Ayala, y ex presidente de Pilcaya, Guerrero. Este personaje en 2017 estuvo relacionado con un accidente en Ciudad de México, donde chocó un costoso automóvil Aston Martin. Tras el incidente, afirmó que “no era de su pro