¿Aranceles generalizados? De lo primero que ocurrirá en 2025 será el segundo arribo de Trump a la presidencia de Estados Unidos. Como se sabe, Trump ha amenazado con imponer un arancel de 25 por ciento a todas las exportaciones de México y Canadá desde el primer día de su mandato, lo que ha generado cierta preocupación y volatilidad en los mercados financieros. Sigo creyendo que esto no ocurrirá, o no al menos en forma generalizada. No podemos descartar la posibilidad de que Trump imponga aranceles selectivos a algunos productos mexicanos, pero creo que un arancel generalizado sería insostenible, ya que a quien más afectaría esto de manera inmediata sería a los propios consumidores estadunidenses y a empresas multinacionales de origen estadunidense.
¿Deportaciones masivas? Trump también ha amenazado con deportaciones masivas de personas indocumentadas. De nuevo, esto no es algo que podamos descartar del todo. Sin embargo, no parece creíble que las deportaciones aumentarán en un volumen tan significativo como el que se ha mencionado en los discursos del presidente electo. Cabe recordar que la primera gestión de Trump no se caracterizó por un mayor número de deportaciones de mexicanos que otras administraciones. De hecho, los ex presidentes George W. Bush y Obama deportaron mexicanos a una tasa más elevada que Trump durante su primer periodo. Bush lo hizo a una tasa de 250 mil por año (2 millones en total) y Obama a un ritmo de 375 mil por año (3 millones en 8 años), mientras que Trump repatrió mexicanos a una tasa cercana a 200 mil por año. Actualmente, Estados Unidos está regresando a alrededor de 17-18 mil mexicanos por mes, es decir, entre 200 y 220 mil mexicanos por año. Si bien las deportaciones podrían aumentar, es poco probable (por factores administrativos, logísticos y económicos) que estas puedan ocurrir a un ritmo superior al que ya se vivió con Obama. En cualquier caso, no está de más estar preparados con suficientes albergues y con la logística necesaria para recibir, alojar, alimentar y transportar a nuestros connacionales que pudieran ser repatriados.
¿Estancamiento económico? La economía mexicana se ha venido desacelerando al menos desde el primer trimestre de 2024. De hecho, el crecimiento de 2024 será significativamente menor a lo que anticipaban a inicios de año tanto el gobierno como instituciones multilaterales y analistas privados. Para 2025 los pronósticos son de un crecimiento todavía menor. En la más reciente encuesta del Banco de México se estima que el crecimiento de 2024 será de sólo 1.6 por ciento y el de 2025 de sólo 1.1 por ciento. Sin embargo, en esa misma encuesta 1 de cada 4 analistas privados considera que el crecimiento podría ser inferior a 1 por ciento y el 77 por ciento considera que el clima de negocios empeorará en los próximos 6 meses. La dinámica reciente del empleo formal confirma que este sector, el más productivo de la economía, se está desacelerando en todo el país, arrastrado por la conclusión de los proyectos prioritarios en el sur-sureste del país, por el estancamiento de la manufactura en la frontera norte y por un deterioro en el ambiente de negocios. De no revertir pronto esta tendencia, el crecimiento en 2025 podría ubicarse en la parte baja de las estimaciones.