Dicho sea reconociendo mi ignorancia enciclopédica, no tenía una idea clara de la influencia de Acción Nacional en la ultraderecha internacional y en particular en el Partido Republicano. Digo, se pueden notar ciertas referencias panistas en los discursos de Donald Trump, Marco Rubio, Elon Musk y por supuesto en los delirios de Kristi Noem, sobre todo por su idea de que el comunismo sigue comiendo niños, que los socialistas te van a arrebatar tus cositas y te va a obligar a bailar el katachó, pero lo de Ted Cruz, el senador kukluxpanista si supera cualquier fantasía.
Cruz es un viejo y casposo senador republicano que un día perdió un debate con López Obrador por no presentar pruebas para demostrar sus dichos, que después de odiar a Donald Trump y cuestionarlo perrunamente en campaña como si fuera un peligro para Estados Unidos (que lo es ), ahora es más trumpista-terraplanista que Trump. Hoy rompe todos los records al llamar fanáticamente a un bombardeo a Teherán, sin tener la menor idea de dónde se ubica, qué clase de cultura y de sociedad se dan ahí, más allá de los lugares comunes de Rambo, cuál es su población. Inmediatamente me recordó al escatológico Ricky Riquín Caquín que en su momento quiso ser estrella de rock’n’roll y presidente de una nación que no conocía, no conoce y nunca conocerá.
Parece que los señores de la Guerra son más güeyes que López Sanbalín que confundió un Kiseki con un Rólex. Si Ted Cruz fuera Tom Cruise en Misión Imposible sabría detalladamente a lo que se enfrenta. Y en vez de andar de bravucón exhibiendo sus carencias, conminaría a mi Donald a tomar en serio las palabras de los ayatolas que tienen con qué responder a Netanyahu y a la Casa Blanca, y que tienen el apoyo de Rusia, China y varios más.
Sobre todo porque en sus arrebatos bélicos y su empecinamiento por construir un Mar-A-Lago para viejos guangos en Gaza, ponen en peligro a la humanidad.
Sin embargo, hay voces dentro de Estados Unidos a las que no vamos a acusar de marxistas como Tucker Carlson -el entrevistador de Ted Cruz- que piensan que si deveras es buena idea eso de patrocinar un Armagedón en nombre de un país que ni siquiera es el suyo, sobre todo porque como todos nosotros quiere ver crecer a sus nietos y disfrutar de la vida.
Que alguien les explique a Trump y a Cruz al resto de los jinetes del Apocalishit que el fin del mundo no es un ratito, que es para siempre.
Ahí si alguien tiene un bunker antinuclear que le sobre, no dude en llamarme.