Cada semana desde hace diez años, pienso de qué tema me gustaría hablar en esta columna que sea de utilidad para mis lectores. Esta semana, ante el embate de los acontecimientos y personajes que hoy tienen al mundo en vilo, pensé en hablar sobre la humildad, ese valor tan menospreciado por las sociedades neoliberales.
El caso es que ayer, sincrónicamente, fui notificada que esta es la última columna que escribiré, por lo menos bajo el sello de Mente y cuerpo sanos.
Evidentemente, más allá de la tristeza natural de dejar un espacio que me ha acompañado por una década, lo primero que quiero hacer es agradecer, primero a Francisco González Albuerne, presidente ejecutivo de Grupo Multimedios quien, sé de buena fuente, es un apasionado y defensor de la práctica de yoga. A Rafael Ocampo, por acercarme a la redacción de La Afición, y a Minelli Atayde y Luis Gutiérrez, sus actuales editores, por la libertad irrestricta que me ofrecieron a lo largo de este tiempo.
Además este espacio me dio oportunidad de publicar mi primer libro: Yoga en tiempo de redes sociales editado por Madre editorial, un texto que con el pretexto del yoga, pone sobre la mesa la importancia y urgencia de volver a incluir la espiritualidad a la vida cotidiana, por cierto de venta en todas las librerías.
Y regresando a la humildad, que en el yoga corresponde al concepto de Ishvara pranidhana, podemos decir que en el fondo se refiere al “compromiso de dirigir la atención y las acciones hacia algo más grande que el yo individual”.
Como dicen los grandes maestros de la conciencia, la aceptación de que los ciclos se cierran y de que debemos estar listos para renovarnos cuando la vida nos los proponga, y fluir en lugar de resistirnos obedeciendo los atavismos del Ego, es fundamental sobre todo en estos tiempos de incertidumbre para todos.
Y como siempre no puedo dejar de recomendar una posición para promover y fomentar la humildad en nuestra psique y nuestro corazón: Baddha Virabhadrasana la postura del Guerrero humilde, que como su forma sugiere nos hace inclinar la cabeza hacia a la vida y sus propuestas que, aunque a veces no lo veamos al principio, siempre sabe más.
Los invito a seguirme en mis redes sociales. En Instagram: @marienestrada y en Facebook: @CaminoamarilloconMariénEstrada. Y como se dice en inglés, last but not least, gracias sobre todo a cada uno de los lectores de este espacio, ojalá les haya sido de utilidad. ¡Hasta muy pronto!
(Con información de sadhakaspace.org)