Este fin de semana habremos de ver quién es quién en la Liga MX.
Ya habían sentenciado varios comentaristas que América –el equipo más popular de Estados Unidos Mexicanos, a pesar de lo gordo que nos cae a quienes no somos sus seguidores—iba a coronarse con los laureles de la victoria en este Clausura 2024.
Le disputarían el título los dos clubes con los que comparte los mismos 14 puntos luego de seis partidos jugados, a saber, CF Monterrey y Tigres. Ese par y nada más, olvídense ustedes de todos los demás.
Pues bien, se aparecieron en el horizonte futbolístico el Pachuca y, miren ustedes, el Cruz Azul. Y, justamente, los hidalguenses se enfrentan en la fecha siete al América y el equipo cementero intentará plantarles cara a los Tigres.
Cuando los amables lectores recorran con su vista estas líneas publicadas en la edición digital de ‘La Afición’ –garrapateadas, como de costumbre, a media tarde del sábado (a las 18:21)— los resultados ya se conocerán.
No pretende fanfarronear este escribidor –o, un poco, nada más— pero lanzó aquí mismo, hace una semana, el pronóstico de que los Chiefs iban a conquistar su segundo Super Bowl consecutivo. Se permite, entonces, consultar su bola de cristal para avisarles a ustedes que Pachuca puede dar la sorpresa ante las Águilas y que el resucitado Cruz Azul, a su vez, va a arrebatarle a Tigres los tres puntos en disputa.
Son meras especulaciones pero sirven para responder a otros vaticinios que resultan un tanto exasperantes en tanto que pretenden consagrar, desde ya, al club de Coapa y concederles a los clubes regiomontanos la categoría de posibles segundones por encima del resto.
Pues no, señoras y señores, la Liga MX puede estar tal vez empantanada en la mediocridad (ya no estoy tan convencido de esto, qué caray, porque he mirado muy buenos encuentros en últimas fechas) o ser un buen negocio antes que un buen escaparate futbolístico pero si algo tiene es que es una competición tan impredecible como irregular en sus resultados.
Mis Chivas dejaron escapar el triunfo en los últimos segundos ante un equipo que sacó las garras luego de una muy larga travesía del desierto y el Necaxa de la muy civilizada Aguascalientes en la que estoy afincado igualó el marcador también al final para mantenerse invicto en el actual torneo. No parece, sin embargo, que vayan a ser los grandes protagonistas en la actual competición.
Al Cruz Azul, por el contrario, le está corriendo una portentosa mística por las venas, de la mano de Martín Anselmi, un caballero que ha logrado implementar todo un sistema de juego en tiempo récord. Y Pachuca está recobrando igualmente su categoría de siempre.
Hoy, con los resultados en la mano, espero que ratifiquen ustedes estas aventuradas apreciaciones. Que así sea, oigan, para refutarles a los otros adivinos sus anuncios de que las cosas estaban sentenciadas nada más por tres equipos en la Liga MX.