Con emoción, tristeza y lágrimas, así se vivió ayer la Pasión de Jesucristo en las diversas escenificaciones del Viacrucis que realizan las parroquias de la Zona Metropolitana de Monterrey, las cuales reunieron a miles de personas.
Como ha sucedido en los últimos 61 años, las calles de las colonias Garza Nieto, Bella Vista e Industrial se convirtieron ayer Viernes Santo en el camino al Gólgota, y donde otra vez un joven, de nombre que personificó a Jesús “murió” en la cruz por la salvación de la humanidad.
El evento inició alrededor de las 08:00 horas con la primera estación del Viacrucis, el juicio ante Poncio Pilatos, y prosiguió con la dolorosa pasión, con Jesús arrastrando la cruz por los barrios.
Un momento culminante fue cuando, luego de los latigazos, la Virgen María se acercó a su hijo. Esta vez, por primera ocasión, el papel de María y Jesús fue representado por madre e hijo en la vida real: Ellos son Karla María López, y su hijo Jaziel, y la sinergia que se creó entre ambos le dio una emotividad especial a la escena en la que María lo consuela.
“¡Déjame que te tome entre mis brazos para besarte con un poco de mi amor! ¡Aquí estoy, hijo mío, como siempre!”, exclamó María a Jesús.
La jornada culminó con la crucifixión de Jesús en la plaza de la antigua Estación de Ferrocarriles, en la colonia Industrial... pero ese no es aún el final, pues el domingo, Él vencerá a la muerte y regresará resucitado, como dicen las Sagradas Escrituras.
Realismo en la Basílica
Para cientos de fieles católicos de la colonia Independencia, en Monterrey, el Viernes Santo es uno de los días más importantes del año pues se lleva a cabo la representación de la Pasión de Cristo en la Basílica de Guadalupe y sus alrededores.
Con vestuarios realistas de la época de la dominación del Imperio Romano sobre Judea y un gran trabajo de los vecinos-actores participantes, el Viacrucis viviente inició a las 17:00 horas, pero desde una hora antes ya había una larga fila de fieles congregados en la explanada de la Basílica para presenciar el evento.
Esta representación es una de las más tradicionales de Monterrey ya que lleva más de 50 años de realizarse en esa colonia.
El recorrido abarca las calles aledañas como Guanajuato, Libertad, Jalisco, Yucatán, para finalmente culminar en la Basílica, la cual estuvo resguardada por elementos de Seguridad del Municipio.
Niños viven su Pasión
Los niños de la capilla Inmaculada Concepción representaron ayer las 14 estaciones del Viacrucis a lo largo de la colonia Valle del Virrey, en el municipio de Juárez.
Decenas de familias acompañaron al pequeño Jesús desde el punto de salida hasta que fue crucificado, mientras que habitantes del sector ofrecían su domicilio para albergar una de las estaciones.
Apoyado por sus padres, con una fe católica inmensa Dorian Sánchez levantó la mano para personificar a Jesús y cumplir uno de sus sueños.
“Yo me ofrecí para ser Jesús y la verdad sentí bonito al ver cómo lo crucificaron, al ver cómo arriesgó su vida para el perdón de nuestros pecados”, expresó Dorian, aún emocionado.
Estrenan Viacrucis infantil
Con una emotiva participación de niñas y niños, la parroquia San Juan Bautista, García, celebró su primer Viacrucis infantil, una representación que reunió a decenas de familias en la tradicional Plaza de los Caídos.
La actividad fue organizada por el grupo Cafarnaúm, encabezado por Andrea Orozco, y contó con el respaldo del párroco Gerardo Flores.
Durante aproximadamente una hora y media, los niños representaron las escenas más significativas de la Pasión, recorriendo las estaciones desde la plaza hasta llegar al templo de San Juan Bautista.
Intensa preparación
Tras más de un mes de preparación, feligreses de la capilla Santa Cruz, en Guadalupe, escenificaron el tradicional Viacrucis.
Entre actores y staff fueron cerca de 100 personas las que participaron en la procesión, que inició en la colonia Las Sabinas y concluyó en la capilla Santa Teresita en Residencial Las Quintas.
“Lo que nos motiva es que el Viacrucis es la celebración más importante de la iglesia Católica, y pues a nosotros como feligreses nos gusta conmemorarlas año con año”, dijo el vecino Joseph González.
Pequeña fusiona amor por la música con su fe en Cristo
Mientras algunos menores esperan la Semana Santa para no ir a la escuela, salir de vacaciones o pasear con sus familias, para esta pequeñita los días santos son la oportunidad perfecta para acercarse más a Jesucristo y a la Iglesia católica.
África Medina Valdez tiene apenas 10 años, y aunque es muy chica, es una integrante fundamental de la estudiantina y coro de la parroquia San Gerardo María Mayela, ubicada en la colonia Villa Alegre, en el municipio de Monterrey.
“¿Qué sientes al cantar ante muchas personas en la iglesia?”, se le cuestionó.
“Es algo que no puedo explicar, es muy bonito y algo que me gustaría que más amigos míos hicieran. Empecé a hacerlo hace casi dos años, yo no sabía nada pero poco a poco fui aprendiendo y hoy me gusta mucho hacerlo”, afirmó África.
Desde pequeña ha estado vinculada a la música gracias a su papá, quien es guitarrista y productor musical.
Cuando entró al catecismo, la niña logró fusionar sus dos grandes pasiones, al integrarse a la estudiantina y formar parte del coro que ameniza la misa de los miércoles a las 19:00 horas.
“De la Semana Santa he aprendido que es un tiempo de reflexión y de estar con Dios, a mí me gusta hacerlo y cada vez soy más apegada a esto. Mi canción favorita se llama ‘Te amaré’ y hasta a veces se me salen las lágrimas”, comentó la corista.
Aunque para sus amistades, la Semana Santa significa vacaciones, África pidió a todos los pequeñines que se acerquen a la iglesia y descubran el significado de la Semana Mayor.
Para Williams, padre de la pequeña, es un orgullo ver a su hija frente a tantas personas en misa, y confía en que será un gusto para toda su vida.
“Como a mí me encanta la música, verla a ella tocar la guitarra me hace sentir muy orgulloso de saber que lo que le estoy inculcando”, declaró.
Con información de Francisco Zúñiga, Mayte Villasana, Martín Ocañas, Pamela Villanueva y Víctor González