La sancionada cobraba y pagaba en bancos estadunidenses lo relacionado con sus operaciones ilícitas.

La entrega de estas personas se realizó en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Toluca, y en el de la Ciudad de México, respectivamente.

A cambio de 5 mil dólares, llevaba a los traficantes de migrantes a zonas vulnerables o sin cámaras de video del muro fronterizo. “Cambió su integridad por dinero y cocaína”, dijo el juez.

Edwin Santiago Márquez Flores admitió a las autoridades que ganó 1.2 mdd por realizar las actividades ilícitas.

Los migrantes viajaban en un remolque sin aire acondicionado; viajaban personas de México, Honduras, El Salvador y Guatemala.

Al ser un negocio más rentable, el crimen organizado está privilegiando el tráfico de personas por encima del trasiego de drogas.

Entre los procesados se encuentra una persona de origen sudanés.

La organización liderada por Ofelia Hernández cobraba una cantidad de entre 10 mil y 70 mil dólares para ayudar a cruzar la frontera hacia Estados Unidos.

Las personas procedían de países como Afganistán, Ecuador, Palestina, Perú, y Venezuela; se dirigían a Centroamérica.

La embarcación, que llevaba a bordo 40 personas migrantes y dos capitanes, despareció en octubre de 2023 cuando iba rumbo a Estados Unidos.