Personas sin hogar y violencia: la cara que Los Ángeles oculta al mundo durante el Super Bowl

​“Cerca del estadio no veremos los campamentos de personas sin hogar, pero si conducen sólo unas millas verán la devastación de Los Ángeles”.

Persona que habita una calle de Inglewood, California. Febrero 2022. | EFE
Los Ángeles /

Banderas, carteles y anuncios del Super Bowl LVI maquillan la realidad de la avenida donde se ubica el SoFi Stadium, que hoy acogerá el gran juego.

Al recorrer el bulevar Century de Inglewood, ciudad del condado de Los Ángeles, permite ser testigos de un lavado de imagen en tiempo récord de una zona conocida por su conflictividad y por los problemas que sufren las personas sin hogar

Con los millones de espectadores viendo el gigantesco acontecimiento deportivo, las autoridades del condado y de Inglewood, se han coordinado para que la imagen internacional de Los Ángeles salga reforzada.

La premisa es garantizar que no se produzca ningún episodio de violencia y borrar cualquier atisbo de los campamentos de personas sin techo que se han disparado por la pandemia de covid-19.

“Cerca del estadio no veremos los campamentos [de personas sin techo], pero si conducen sólo unas millas verán la devastación de Los Ángeles”, explica la directora del programa de acogida de la organización Union Rescue Mission, Cynthia Jiménez, a EFE.

Después de Nueva York, Los Ángeles es conocida por liderar cada cierto tiempo las estadísticas nacionales relacionadas con el número de personas viviendo en la calle

Hace menos de una semana, la policía desalojó a más de medio centenar de personas que tenían desplegadas sus tiendas en un tramo del boulevard Century que conecta con la autopista 405.

Desde la institución benéfica The Dreambuilders Project informaron que se desconoce dónde han reubicado a las 60 personas que acampaban en esta zona próxima al estadio.

“No están detenidos pero se les ha obligado a irse de esta parte de Inglewood”, dijo el presidente de la organización, Mayer Dahan, a EFE.

La violencia también creció en todo el condado tras la pandemia, y hace tres semanas en el propio Inglewood se produjo un tiroteo durante una fiesta de cumpleaños entre jóvenes que dejó cuatro fallecidos.

Homicidios, tiroteos, robos masivos en negocios y accidentes de tráfico provocados por carreras ilegales han despertado una sensación de inseguridad en una ciudad que creía tener atajado el problema de la criminalidad tras décadas de lucha constante contra las bandas callejeras.

evr

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