La VI Feria Internacional de Importaciones de China (CIIE) -la primera expo completamente presencial desde el inicio de la pandemia de covid-19- es una muestra no solo de productos, tecnologías y servicios nuevos de todo el mundo, sino también de la sólida confianza que tienen las empresas extranjeras en la economía y el mercado chinos.
Este año, la CIIE cuenta con una mayor superficie para la exposición comercial y con la participación de un mayor número de empresas de Fortune 500 y de líderes del sector en comparación con ediciones anteriores. Una gran cantidad tanto de "viejos amigos" como de "caras nuevas" expresaron su compromiso e interés por explorar oportunidades en la segunda economía más grande del mundo.
En concreto, el evento de este año cuenta con más de 200 expositores estadounidenses de sectores como los semiconductores, dispositivos médicos, vehículos de nueva energía y cosméticos, lo cual supone la mayor presencia de los Estados Unidos en la historia de la CIIE.
Entre los expositores, 17 pertenecen a las industrias agrícola y alimentaria, y están encabezados por primera vez por el Gobierno estadounidense.
La Feria misma es un motor y una plataforma importante para la apertura de alto nivel que ofrece China, y desde ahí comparte su enorme mercado con el mundo. En el discurso inaugural del pasado domingo, el primer ministro chino, Li Qiang, afirmó que el país siempre ha estado dispuesto a compartir sus oportunidades de mercado, y prometió esforzarse por ampliar aún más la apertura y facilitar el acceso a los mercados.
Con una población de más de 1 400 millones de habitantes y un grupo de renta media de más de 400 millones de personas, China ofrece un enorme potencial en términos de demanda de mercado. Su compromiso con la apertura y la ampliación conjuntas de los sectores del mercado mundial y sus acciones concretas en este sentido consolidan aún más la confianza de las multinacionales en el país.
Durante la expo, Julian Blissett, vicepresidente ejecutivo de General Motors (GM) y presidente de GM China, declaró que el gigante automotriz "desea aprovechar más el enorme potencial del mercado chino, que tiene un gran atractivo por su dinamismo y apertura".
A pesar del letargo que ha mostrado el comercio mundial desde principios de año, las importaciones y exportaciones de China se han mantenido estables y con una creciente acumulación de factores positivos. Datos oficiales publicados el martes mostraron que, en octubre, sus importaciones tuvieron un aumento interanual de 6.4 %. En los primeros diez meses de 2023, sus importaciones y exportaciones totales de bienes revelaron una expansión interanual de 0.03 %, la cual revirtió el descenso de 0.2 % que se había registrado en los tres primeros trimestres.
Según los cálculos, en los próximos cinco años el comercio total de bienes y servicios de China alcanzará 32 billones de dólares y cinco billones de dólares, respectivamente, lo cual abrirá enormes oportunidades de mercado para el mundo.
"Este año abriremos en China otros 800 puntos de venta, con lo que tendremos más de tres mil", declaró Willie Tan, director general de Skechers en China, la República de Corea y los mercados del Sudeste Asiático. "El mecanismo de mercado de China mejora cada vez más, y su apertura de alto nivel no ha dejado de expandirse. Para las empresas extranjeras, un entorno empresarial de excelencia significa una inyección de optimismo".
Según un comunicado del Fondo Monetario Internacional publicado el pasado martes, se prevé que el PIB real de China crecerá 5.4 % en 2023. "La economía china está en el camino de alcanzar el objetivo de crecimiento que se propuso el Gobierno para 2023, lo que refleja una fuerte recuperación tras el covid".
Tal como lo han intuido los empresarios en la CIIE, la economía china seguirá funcionando como motor del crecimiento global al inyectar más energía positiva a la economía mundial mediante su apertura de alto nivel.
RRR