"He estado involucrada con China toda mi vida", dijo Galina Kulikova, primera vicepresidenta de la Asociación de Amistad Rusia-China, quien recibió la Medalla de la Amistad, el más alto honor estatal de China.
La participación de toda la vida de Kulikova con China ejemplifica los lazos duraderos de amistad y cooperación entre las naciones, especialmente en un momento en el que China continúa involucrándose globalmente a través de iniciativas como la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI).
Amistad tradicional en la nueva era
Kulova agregó que los lazos bilaterales se consolidan a nivel local y hay un creciente interés por China entre los rusos, especialmente entre los jóvenes.
"Debo decir que nuestra Asociación de Amistad Rusia-China hoy en día se centra en las regiones porque la base pública de las relaciones bilaterales solo puede desarrollarse a través de las regiones de Rusia", expresó.
"Nuestra tarea es trabajar con los jóvenes. El número de escuelas que ofrecen enseñanza del idioma chino está creciendo. El interés en el idioma chino está creciendo", dijo.
"Chicos, ustedes son jóvenes, el futuro de nuestras relaciones está en sus manos. Aprendan el idioma chino, estúdienlo y siempre tendrán trabajo porque nuestras relaciones se están desarrollando", dijo a los jóvenes estudiantes.
Kulikova estudió en el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú y luego participó en la fundación de la Asociación de Amistad Soviética (Rusia)-China en 1957, donde ha trabajado durante 62 años.
Fue invitada a presenciar el desfile militar en la Plaza de Tian'anmen en Beijing, el 1 de octubre de 2019. También asistió a celebraciones en los 40s, 50s y 60s aniversarios de fundación de la República Popular China.
Después de más de 65 años dedicada a la diplomacia pública entre Rusia y China, Kulikova cree que es imposible comprender a China sin entender su modernización y cómo se lleva a cabo.
La modernización china es una de las principales direcciones en la construcción del socialismo con características chinas, que abarca no solo los principios económicos, sino también el desarrollo espiritual y la naturaleza, explicó.
"Lo más importante es que China no solo se enfoca en su propio desarrollo, sino que también contribuye directamente al desarrollo exitoso de otros países y pueblos", agregó.
Conectividad mejorada para el desarrollo
Eva Chairunisa tiene un profundo conocimiento de la contribución que Kulikova acaba de mencionar.
Como secretaria corporativa general de Kereta Cepat Indonesia, China, Chairunisa ha sido testigo del desarrollo del Tren de Alta Velocidad (TAV) Yakarta-Bandung.
Con una velocidad de diseño de 350 kilómetros por hora, el tren de alta velocidad de 142.3 kilómetros redujo el tiempo de viaje entre Yakarta y Bandung, en la provincia de Java Occidental, de más de tres horas a unos 40 minutos.
Hasta agosto, el TAV Yakarta-Bandung había transportado a 5 millones de pasajeros y brindado el servicio a 250,000 pasajeros de 157 países y regiones, informó Chairunisa a Xinhua.
"También vale la pena mencionar que la operación del TAV Yakarta-Bandung no solo ha agregado una nueva infraestructura de transporte, sino que también ha cambiado los estilos de vida locales. La gente ahora está más dispuesta a elegir un transporte público amigable con el medio ambiente y que ahorre tiempo", dijo Chairunisa.
Los avances de China han beneficiado en gran medida a los países vecinos, promoviendo el progreso social. Esto incluye la cooperación bilateral entre China e Indonesia, que no solo involucra proyectos gubernamentales, sino también en otras áreas, dijo.
"Lo más importante es que ha ayudado a mejorar el nivel de recursos humanos en Indonesia. Nuestra fuerza laboral ha aprendido mucho de la tecnología que China ha compartido con nosotros. Por ejemplo, no teníamos conocimientos previos de la tecnología TAV, pero ahora la hemos aprendido y dominado de manera integral", agregó.
Si bien China ha hecho un milagro con su red de trenes de alta velocidad, superando los160,000 km en operación también ha intensificado los esfuerzos para ayudar a otros países del Sur Global a mejorar la conectividad.
Según estimaciones del Banco Mundial, los proyectos de transporte en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta podrían reducir los tiempos de viaje a lo largo de los corredores económicos en un 12 por ciento, aumentar el comercio entre un 2.7 por ciento y un 9.7 por ciento, aumentar los ingresos hasta en un 3.4 por ciento y sacar a 7.6 millones de personas de la pobreza extrema.
Unidos por la modernización del sur global
Los esfuerzos de China para ayudar al Sur Global para alcanzar la modernización van más allá de la construcción de infraestructura. El arroz híbrido chino, por ejemplo, ha ayudado gradualmente a Madagascar a erradicar el hambre.
Madagascar, que depende en gran medida de las importaciones de arroz debido a los bajos rendimientos y las técnicas obsoletas, experimentó una transformación después de que la Academia de Ciencias Agrícolas de Hunan de China y Yuanshi Seeds Industry Hi-Tech Co. lanzaran un proyecto de arroz híbrido en 2007.
En diciembre de 2022, el arroz híbrido cubría 75,000 hectáreas con rendimientos de 7.5 toneladas por hectárea en el país africano, superando con creces las variedades locales.
Madagascar se ha beneficiado enormemente de una cooperación "fructífera" con China, dijo el presidente de Madagascar, Andry Rajoelina, en una entrevista con Xinhua, señalando que la Iniciativa de la Franja y la Ruta ha brindado oportunidades significativas para que el país africano "se integre más profundamente en las cadenas de suministro globales".
Hasta ahora, China ha brindado asistencia a más de 160 países, ha colaborado con más de 150 países y más de 30 organizaciones internacionales en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, y ha promovido la cooperación en iniciativas de desarrollo global con más de 100 países y múltiples organizaciones internacionales, incluidas las Naciones Unidas.
Durante la Cumbre 2024 del Foro de Cooperación China-África celebrada en Beijing a principios de septiembre, los líderes del Sur Global no perdieron el tiempo en aprender visitando varias regiones del país asiático.
El presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, visitó Shenzhen para conocer la innovación tecnológica de las empresas chinas; El presidente de Zimbabwe, Emmerson Mnangagwa, visitó las zonas rurales de la provincia de Hunan para aprender sobre la modernización agrícola; El presidente senegalés, Bassirou Diomaye Faye, visitó la provincia de Shandong para aprender sobre tecnología y maquinaria agrícola, entre otras áreas.
La modernización y el rejuvenecimiento de China beneficiarán a los países en desarrollo del Sur Global en su búsqueda del desarrollo, dijo Maged Monir, editor en jefe del periódico egipcio Al-Ahram, el diario más importante del país.
"Una de las características más importantes de las relaciones de China con los países del Sur Global o en desarrollo es que China busca la cooperación en el desarrollo sin interferir en los asuntos internos de otros países", dijo Monir.
RRR