El presidente de la Asociación Portuguesa de Energías Renovables (APREN), Pedro Amaral Jorge, expresó sus intenciones de aumentar la inversión de China en el sector de la energía solar debido a la alta calidad de los productos solares fabricados por ese país.
Agregó que, a la fecha, muchas corporaciones chinas suministran productos fotovoltaicos para que sean instalados en el país luso logrando así la generación de un porcentaje mayoritario de los 700 megawatts que se generan en el país.
El experto también señaló que grandes corporaciones chinas han invertido directamente en Portugal al adquirir una parte de las compañías eléctricas del país.
Amaral Jorge destacó que tanto las empresas que están afiliadas a la APREN como los bancos que aportaron capital para las inversiones comprobaron que los productos chinos tienen alta calidad, lo que respalda la reputación de los proveedores. Además, subrayó que una ventaja que también tienen estos productos es su precio competitivo.
De acuerdo con el presidente de la APREN, Portugal ha apostado por la generación de energía solar desde 2016 y al día de hoy se ha instalado una capacidad de 2.2 gigawatts (GW). El país pretende seguir por este camino e instalar alrededor de 8 GW en 2026 o 2027 y alcanzar los 22 GW para 2030, dijo Amaral.
"Portugal tiene ventajas competitivas sobre otros países europeos porque tiene más exposición a la luz solar, lo cual le permite instalar paneles en todo su territorio, sobre todo en el sur, que recibe la mayor irradiación solar de Europa", señaló.
Para alcanzar los objetivos planteados, Portugal desarrolló un marco legal y condiciones favorables para aumentar la producción de energía solar, declaró Amaral Jorge.
"Para alcanzar el objetivo de incrementar la capacidad instalada, debe aumentar la cooperación con China. Yo espero que, en el futuro, también haya inversiones chinas para la fabricación europea de productos destinados al mercado local", finalizó el experto.
GCM