5 Consejos para mejorar la convivencia con tus hijos a largo plazo

El tiempo de calidad con los hijos es de suma importancia para su desarrollo emocional, mental y personal, asegura su estabilidad y socialización con los demás pero es una tarea que debe ser desempeñada totalmente por los padres de familia.

Padres de familia deben atender inquietudes de los hijos y al mismo tiempo fomentar la convivencia familiar de calidad. (Cortesía Pexels)
Tania Cobos
Torreón, Coahuila /

Padres e hijos hoy más que nunca deben de tener una convivencia familiar, y es que ante tanto dispositivo electrónico la relación en casa se puede llegar a perder, es por ello que Leopoldo Camacho Sustaita, asesor académico de la Universidad Pedagógica Nacional de Torreón, aconseja puntos que son importantes para el crecimiento sano de los niños, resaltando que los padres deben de poner atención a las inquietudes de los pequeños.

1. No heredar conflictos existenciales

El experto comenta que se debe tener mucho cuidado al permear a los niños de conflictos pues estos son determinantes en la vida del menor. "Ya de por sí el niño no necesita mucho para echarse la culpa de algo, como para que los mismos padres aniden en ellos significados erróneos, hay que entender que ellos están en formación, no hay que transferir conflictos de adultos a los niños", añade.

Sugiere no configurar a los niños con la identidad de los padres, sino que ellos lo hagan por sí mismos, para que ellos se puedan desenvolver con confianza y responsabilidad en ciertos escenarios, alimentando su derecho a preguntar y opinar, no hacer círculos de silencio, siempre vivir en el diálogo.

2. Madurez positiva

La comprensión es la base para que ambas partes de la situación salgan beneficiadas. Hablar de madurez, dice el experto, se refiere a la capacidad de apertura para escuchar y comprender cualquier tema que salga en casa, evitando controlar excesivamente los ambientes e inquietudes de los niños y jóvenes.

"La peor decisión que un padre puede tomar para educar es el control excesivo, eso no funciona nunca", comenta. Considera importante que los padres deben tener la disposición de orientar, preguntar qué saben los hijos sobre "X" tema, dónde lo aprendieron y sobre ello colaborar en familia, nunca restringir o influir, darle la visión de ambas partes (buena y mala) de un tema para orientar con criterio y -sobretodo- ponerse en los zapatos del menor.

"Ya no funciona el discurso restrictivo, moralista y de control, debe ser una relación correcta y formativa".

3. Reconstruir autoridad

El maestro Camacho, comenta que es responsabilidad y obligación de los padres entender hasta qué punto tienen autoridad y hasta qué otro deben transformarla para obtener mejores resultados. "Los padres deben ajustar su criterio de autoridad, deben de innovar la misma constante y permanentemente para construir una buena relación", comenta.

Recalca que es un error seguir educando al adolescente o adulto como un niño, pues en todos los casos los padres se verán retados con preguntas o actitudes en las que se verán con el riesgo de creer que pierden autoridad pero este pensamiento es un error total. "No es que vayan a perder autoridad, es adecuar la misma a los nuevos escenarios y realidades, eso de "por qué soy tu padre/madre", ya no vale...", añade.

4. Evita pasar "la pelotita" a otros

Se debe estar en condición de atender a los hijos y no caer en la situación de "pregúntale mañana a tu maestro". El experto aconseja a los padres que ante situaciones de "jaque" (cuando los padres no supieron cómo actuar o qué responder ante cuestionamientos), antes de hablar, preferible consultar el problema juntos, padres e hijos.

"El niño siempre va creer que los padres tienen la suficiente capacidad intelectual para resolver sus dudas, si esto no es así, no hay que ponerse a inventar. Que lo tomen como capacitación, no hay que tenerle miedo a ningún tema, preferible platicarlo en casa antes que buscar otra persona, hay que abordar con pertinencia cada tema".

5. Espacios de diálogo y apertura

"El padre necesita aprender a escuchar, eso permite que se comprenda qué le preocupa a mi hijo o hija ", menciona Camacho. El docente finaliza que es importante que los padres sean atentos a cualquier inquietud de sus hijos, ya que en un primer momento ellos no se van a sentir cómodos de platicar lo que tienen, se deben construir espacios sanos y de confianza para que ellos se sientan con la libertad de expresarse.

"Hay que aprender a destejer los problemas del niño a través de estos espacios, para ello también se debe cuidar el nivel de autoestima del menor", menciona. Argumenta que a medida que el niño visualice escenarios estables y seguros, el niño avanzará y no caerá en problemas existenciales, contará con su familia -y hasta otros familiares- para apoyarlo si es que todos cooperan.


HAGAMOS COSAS JUNTOS

Comenta que para crear mejores vínculos o canales de comunicación, ayuda que los padres estén abiertos a realizar cualquier actividad con los hijos, entre ellas:

-Videojuegos.

-Prácticas artísticas.

-Juegos de mesa. 

-Deportes. 

-Cualquier hobby de la preferencia del menor.


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