Tras 100 años de extrañar su presencia en planicies de Coahuila, se celebra la integración de la segunda manada en México con el traslado de 19 bisontes de la Reserva de la Biósfera Janos de Chihuahua a las Áreas de Protección de Flora y Fauna Maderas del Carmen y Ocampo de Coahuila.
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El bisonte americano de las planicies (Bison bison) es el mamífero terrestre más grande del continente americano, esta impresionante especie era parte de la vida en planicies de Canadá, Estados Unidos y México donde pertenecía a la dinámica cultural y de cosmovisión de sociedades indígenas americanas.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) precisa que hace 200 años el planeta contaba con al menos 30 millones de bisontes, pero por la destrucción y fragmentación de pastizales, enfermedades y cacería estos ejemplares fueron escaseando hasta llegar apenas 1,000 individuos hacia 1880.
Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Durango fueron territorios hogar del mamífero, sin embargo en la segunda mitad del siglo XIX ya no se contaba con bisontes en México, hasta que investigadores, miembros de organizaciones de la sociedad civil, academia, sector privado, organizaciones internacionales y el gobierno mexicano desarrollaron una propuesta para traer de regreso a los bisontes al país.
Se logró entonces la donación de 23 bisontes del Servicio Nacional de Parques de Estados Unidos provenientes del Parque Nacional Wind Cave como parte de una colaboración binacional para recuperar a la especie. El 9 de noviembre de 2009, en la Reserva de la Biósfera Janos, Chihuahua, se recibieron esos 23 ejemplares como manada de conservación y con la finalidad de que éstos dieran lugar a crear otras manadas.
Conanp informa a través de un comunicado que 10 años después la manada de Janos, Chihuahua supera los 200 ejemplares y ahora se establece una segunda manada a las Áreas de Protección de Flora y Fauna Maderas del Carmen y Ocampo, en Coahuila. Vía terrestre llegaron con éxito 19 bisontes con los que finalmente estos ejemplares se colocan en tierras coahuilenses.
La tarea no ha sido sencilla, para el éxito de este proyecto la Conanp agradece a la Secretaría de Medio Ambiente de Coahuila, a la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología del Gobierno de Chihuahua, a CEMEX, S.A.B. de C.V. (“CEMEX”) (BMV: CEMEXCPO), AES México, Fondo Mexicano para la Conservación de la Naturaleza, The Nature Conservancy, a la Universidad Nacional Autónoma de México, Universidad Autónoma Metropolitana, al Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos, Tutuaca Mountain School, PROFAUNA A.C., a la Dirección General de Vida Silvestre, al Servicio de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), PROFEPA y un centenar de personas por su valioso apoyo en la recuperación del bisonte y otras especies en riesgo.