La pandemia por covid-19 ha sido desafiante en muchos sentidos, uno de ellos es la forma de enseñar y aprender, los docentes que no estaban tan cercanos a la tecnología, han tenido que capacitarse en esta modalidad. Otros más, tocan a la puerta de la casa de sus estudiantes para llevar las clases.
José Félix Bustamente Romero, maestro de Educación Especial, explica que esta pandemia los ha llevado a reflexionar acerca de la importancia de las relaciones sociales, "hoy que estamos lejos de nuestros alumnos nos lleva a valorar las relaciones sociales a las que estábamos acostumbrados. Así como ponernos en el lugar de los chicos que no tienen oportunidad a acceso a la tecnología, y hay que buscar alternativas para estar cerca de ellos".
Menciona que desde la suspensión de clases presenciales, tanto él como el maestro Carlos López, director de la escuela Francisco Villa, turno vespertino de la colonia Bugambilias en Gómez Palacio, Durango, se han dado a la tarea de llevar trabajos a sus alumnos hasta la puerta de su casa.
"El principal reto es lograr que continúen sus estudios, así como acercar a estos niños a la tecnología, buscar los recursos para que estén en contacto con sus docentes. Otro reto que debemos afrontar al regreso a clases presenciales, es el trabajo de las emociones con los alumnos, quizá este sea un año escolar en que no estaremos en contacto con los niños y la interacción va a cambiar, por lo que será necesario reforzar no solo los contenidos académicos, sino también el generar la expresión de emociones".
Para José Félix es importante ayudar a quienes no cuentan con las herramientas tecnológicas para conectarse a una clase, "si no nos preocupamos por ellos, quien más lo va hacer, el tiempo avanza y ellos se pueden quedar rezagados, aunque hay alumnos que demuestran su interés por continuar con sus estudios ya que realizan su trabajo con esfuerzo, hay quienes al no tener contacto no trabajan y no aprenden".
Bustamente Romero, también brinda herramientas a los docentes para el trabajo a distancia con sus alumnos, así como orientación a padres de familia, "el proyecto de ciencias y el trabajo de robótica que se realiza con los niños de tercero y quinto de primaria es una forma de motivación. Se les acerca a materiales que ellos desconocen totalmente, la clase virtual se brinda cada viernes, es difícil transmitir a través de un video ciertos conocimientos, ya que hace falta la retroalimentación de forma presencial, sin embargo, se continúa con enseñando a los niños esperando pronto se regrese al salón de clases para reforzar los todos los conocimientos".
Finalmente, José Félix dice que la educación a distancia no es una tarea fácil, pero sí un trabajo que deja grandes aprendizajes.