El estrés es cada vez es más frecuente entre alumnos desde primaria hasta universidad, puede afectar el rendimiento académico, el interés para participar en proyectos y su bienestar emocional.
La adolescencia es la etapa que comienza con las alteraciones de salud mental, por lo tanto es un momento clave de acción. Al menos 20% de los adolescentes sufre una enfermedad mental, según la Organización Mundial de la Salud, aunque en numerosas ocasiones no se diagnostica a tiempo para facilitar su superación.
María José Salazar Terrazas, psicóloga con entrenamiento en Desarrollo Humano e Inteligencia Emocional explica que el estrés es una reacción física ante un evento que se puede presentar en la vida, "pueden ser respuestas no definidas y atendidas, que llevan a que el cuerpo se tensione y active el estrés".
Recomienda crear en casa espacios de meditación, en donde los miembro de la familia puedan revisar las emociones generadas durante el día. Sugiere la práctica mindfulness, que es la atención plena que nos trae al momento presente para disfrutar de lo que está pasando, el aquí y el ahora.
Posturas de relajación
Lo ideal es practicarlas en un espacio de paz, ambientar con música y aceite esencial que invite a la tranquilidad. Se recomienda que se realicen sobre un tapete:
• Niño: Hincado separando las rodillas a lo ancho de las caderas, la persona se sienta sobre los talones, se lleva la frente al tapete y las manos se estiran por encima de la cabeza para relajar los hombros.
• Montaña: Parado con la espalda recta se giran hombros hacia arriba y atrás con el fin de que el pecho se abra, se trata de llevar la barbilla hacia el cuello manteniendo los pies siempre separados a lo ancho de los hombros y se llevan los dos brazos al lado del cuerpo con las palmas de la manos hacia el frente.
- Te recomendamos Colegios esperan recuperación de la matrícula Aula
• Árbol: Parado se deja el pie derecho en la tierra, se va a levantar la pierna izquierda tratando de llevar la planta del pie hasta la ingle. Las manos se levantan por encima de la cabeza y se juntan las palmas de las manos.
• Pinza: Sentado con las dos piernas hacia el frente, se levantan las manos por encima de la cabeza inhalamos, exhalamos y tratamos de tocar los dedos de los pies con las manos, sino se llega puede ser a los tobillos o rodillas, pero se mantiene inmóvil un par de respiraciones.
• Loto: Sentado con las piernas cruzadas tratando de llevar el pie derecho por encima del muslo izquierdo y el pie izquierdo por encima del muslo derecho. Se mantiene la posición por un par de respiraciones.