Cuidar a las abejas es un trabajo en que todos podemos participar, ya que gran parte de la vida depende de los polinizadores, ya que de ellos depende la reproducción de las plantas, lo que quiere decir, que son necesarios para conservar la biodiversidad.
Alfredo Daniel Rivera Zamarripa, profesor investigador en la Universidad Politécnica de la Región Laguna, explica que en México existe una gran diversidad de especies de abejas, se cree que son más de 1,800 las que son nativas. Es por ello que desde la UPRL, alumnos y docentes trabajan para cuidar a estos insectos, ya que brindan grandes beneficios ambientales.
"Las abejas tienen una gran importancia económica, ya que hay personas que se dedican a la producción de miel y el aprovechamiento de cera y sus derivados, lo cual se logra principalmente por la polinización".
Rivera Zamarripa expresa que aproximadamente el 70% de la producción de alimentos de consumimos ya sea melón, la mayoría de las hortalizas y muchas de las frutas requieren de polinización para poder crear los frutos, "en la región lo más destacado es el melón y si no existiera una polinización por parte de las abejas como de otros polinizadores no se tendría dicha fruta, aunque se le colocaran los mejores fertilizadores o se tuviera el mejor uso de insecticida para las plagas".
Alfredo comparte que hay evaluaciones que hablan del valor de la abeja, más que producir miel, o cera, lo más importante es la polinización, "estimaciones que dicen que vale 20 veces más la polinización que realizan estos insectos, que la miel. Estiman que arriba de 50 millones de pesos son los que se generan gracias a las abejas. Ellos lo hacen de forma natural para generar su reserva".
Daniel Rivera afirma que desde la universidad se trabaja para cuidarlas ya que brindan grandes beneficios ambientales, pues muchas especies vegetales, frutales, árboles, aprovechan la polinización de estos insectos, porque además de que es muy eficiente en toda su vida, nunca transmiten enfermedades.
En la Politécnica Región Laguna se cuenta con un campo experimental con cultivos de melón, pepino y calabaza, éstas son zonas de alimentación porque durante la primavera hay alimento cuando la flor del mezquite y del huizache se mantiene vigente, es decir las abejitas están más activas, y una forma de mantenerlas cómodas es ponerles a su disposición plantas que generen flores.
"El manejo que le damos en la universidad es intentando utilizar los insecticidas que se conocen como selectivos, los cuales se caracterizan por no dañar a los insectos que están sobre las plantas, ya que respetan a toda la fauna".
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Si se desea ayudar a estos insectos, el investigador recomienda se les coloque agua en contenedores pero ponerle piedritas o espuma, tal como lo realizan en la universidad, ya que se humedece y no permite que los insectos se ahoguen. "Ahora que estamos en una temporada muy caliente y seca, por lo que es necesario dejarles flores, intentar no utilizar insecticidas tóxicos, brindarles agua y procurar que estén en sombra, ya que con el calor extremo pueden estresarse".
El profesor sugiere que una de las actividades que se deberían de realizar en la región para preservar a las abejas, es empezar a reproducir las especies nativas como el mezquite, ya que aproximadamente las abejas de cada árbol, pueden llegar a sacar un kilo de miel. Esto se tiene que hacer en periodos en donde el clima no sea tan extremo.