Los países señalaron que tienen como objetivo presentar nuevas NDC que sean consistentes con las trayectorias de emisiones del IPCC.

Ambas dependencias trabajarán coordinadamente para frenar esta problemática del país.

Denuncian la falta de diálogo con las víctimas, el retroceso en las medidas de justicia, y la minimización del impacto ambiental.

Esta ocasión, la campaña tiene como meta recaudar 6 millones de pesos, para mantener una colonia de 130 ajolotes en el laboratorio.

En la clausura de los diferentes aserraderos participaron elementos de la SSP, Guardia Nacional y Sedena.

Pablo Ramírez, campañista de Clima y Energía de Greenpeace México, dijo que “combatir la pobreza energética nos beneficia a todos”.

Se han inspeccionado más de 164 mil árboles hasta el 15 de noviembre.

La organización destacó que hay casi 300 mil familias mexicanas que dependen de la pesca ribereña.

Gustavo Alanís criticó la falta de voluntad política para encontrar acuerdos, en comparación con años pasados.