¿Cómo hago para que se ponga buena mi vida?

Se Puso Buena

Fer Aragon

¿Qué hago para que se ponga buena mi vida?
Fer Aragon
Buenos Aires, Argentina /

"¿Cómo hago para que mi vida se ponga buena, Fer?" Escuché esta pregunta infinidad de veces. Seguramente has escuchado eso de que hay que vivir cada día como si fuera el último, de no postergar más, de ponerte primero e ir por esos sueños olvidados, de salir de tu zona de confort o comodidad, de dejar tu pasado atrás, de dejar de hacer planes y tomar acción…y tantas otras frases e ideas hermosas, grandiosas, impactantes, que te dijiste, que leíste o escuchaste en algún libro o video o en ese cursito que hiciste y del que tan motivado y entusiasta saliste…

¿Cuánto nos dura esa música en los oídos, esa motivación, esa energía, esas ganas, esa esperanza de que ahora sí voy a poder, que lo voy a lograr, que no me para nada ni nadie? ¿Cuánto tiempo has sostenido ese ímpetu, ese envión? ¿Meses? ¿Semanas? ¿Días? ¿Horas?

Y vuelves, tarde o temprano, a lo mismo, un poquito mejor, un poquito peor, pero que sabe a lo mismo, años y años de más de lo mismo o parecido.

¿Y entonces, cómo salir de ese laberinto, de ese espiral, de volver siempre a lo mismo, de volver al punto de partida, de sentirme un boomerang lanzado a toda velocidad y dando la vuelta hacia el mismo lugar con esa misma prisa? A veces sentir que estoy corriendo en el mismo lugar (¿será por eso por lo que las cintas de correr no son para mí? je), que no avanzo, que doy un paso para adelante y dos para atrás.

Si yo supiera cómo salir de ahí, si yo te pudiera dar garantía de que hay un camino, que hay una salida, caería en algo que no me cuadra, que me hace ruido, quizás por mis propias limitaciones, mi ceguera, mi pensamiento básico, hasta a veces cavernícola, y disculpa si acá esperabas que te dé la llave de la felicidad, las claves del éxito, un mensaje cósmico universal. Sí, ya me di cuenta, no necesitas decírmelo, no soy un iluminado. Me cuesta decirlo, je.

¿Qué quiero decirte con todo esto? ¡Que no tengo idea cómo! Sí, ya sé, ¡cerrá el blog! Podés decir que para qué escribo esto, pero ten en cuenta algo, mirá cómo insistís en buscar que alguien te venga a decir cómo vivir una vida extraordinaria. Como seguís buscando una respuesta que te suene válida y que venga de alguien a quien le das autoridad para decírtelo porque supuestamente sabe o es más que vos.

¿Qué tengo que ver yo con que vos creás que no sabés cómo llegar a crear algo grande en tu vida? Y vivís preguntado, cómo, cómo, cómo… ¡Que sé yo! ¡Ni idea!

Ahora, déjame decirte que no tengo idea de cómo crear una vida extraordinaria. No tengo los cinco tips, las siete claves o los nueve hábitos… pero sí te puedo contar un poco de mí y de lo que pienso, de cómo veo las cosas, de mi perspectiva, de mi sesgada visión y, desde mi subjetividad, cómo hacer que tu vida se ponga buena, no perfecta, sólo buena o ¡buenaza! jeje.

Algunos quizás se preguntarán o estarán diciendo: “eres un conformista, Fer”. ¿Cómo no apuntar a la perfección, a lo máximo? Puede ser que tengas toda la razón. Pero sabés una cosa, soy esto que lees, voy a ser honesto y no te voy a vender espejitos de colores o la vida de tu superhéroe favorito.

Reconozco mi conformismo y, si quieres, mi mediocridad. Yo lo veo más por el lado de la aceptación y aceptar no es resignarse. Quizás en otra vida consiga la perfección. En ésta, sigo estando lejos.

En conclusión, no sé cómo responder esta pregunta de “¿cómo hacer? de “¿cuál es el camino correcto e infalible?”. Entonces, como no sé cómo, me invento que no es importante el cómo. Yo creo que sí. No tengo idea de cómo porque el cómo ¡no es lo relevante!

Entonces, no importa cómo lo hagas. No pienses en claves, tips o fórmulas mágicas. Libérate de la necesidad de saber cómo alcanzar esas cosas o juguetes que te harían sentir completo o al menos esa es la fantasía. Quizás otros te puedan decir cómo y qué camino tomar cuando sepas a dónde quieres ir. ¡Uhhh, disculpa, te hice otra pregunta! Bueno, al fin y al cabo, creo que me defiendo bastante bien haciendo preguntas y no tanto dando respuestas.

¿Lo ves como una opción? esto de no saber cómo y así y todo lanzarte igual. Ir probando, ir, como dice el poeta, hacer camino al andar. Caminar, resbalar, levantarte, cambiar, caer y volver a levantarte, dar, aunque sea un pequeño pasito todos los días.

Esa fue y es mi experiencia: dejar de pensar en el plan perfecto, dejar de analizar y hacer un cálculo de probabilidades de éxito o fracaso, sin siquiera dar un paso. Quizás podamos empezar por crear un plan de acción flexible, arrancar, dar los primeros pasos y lanzarte sin garantía de éxito. Y así disfrutarte el viaje, disfrutar el día a día, los pequeños logros, los avances, aunque sean mínimos, permitirte caer y volver a empezar cuantas veces se requiera.


Ahí está la respuesta que estás buscando: ¡disfruta el viaje! Ya sé, no me digas, no era esa la respuesta que buscabas. Ahora te preguntarás “y cómo disfrutarme el viaje”. Vivir el presente, dicen algunos, y que se ponga buena.

@feraragonoficial


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Fer Aragón

Nací en Buenos Aires, Argentina.

Estudié Administración de Empresas e hice un posgrado (MBA), trabajando en empresas hasta mis 35 años. Por esos días, año 2001, hice un entrenamiento en potencial humano que impactó profundamente en mi vida. A partir de allí, empecé a recorrer el camino del desarrollo de mi potencia y la búsqueda de un propósito de vida que me apasionara.

Estudié, me certifiqué como coach, tuve grandes maestras y maestros que me brindaron la posibilidad de crecer tanto en lo personal como en lo profesional. Y a partir de allí tuve el honor y el privilegio de entrenar a decenas de miles de seres humanos en toda Latinoamérica. 

Hoy, me sigo entrenado con todos aquellos que se acercan a reinventarse, a crear no sólo resultados, sino a que estos estén totalmente alineados a un propósito de vida que inspire y provoque a otros. Mi vida no es perfecta, pero #sepusobuena. Y eso es lo que me mueve, no sólo a seguir en este camino, sino de apoyar a que tu vida también se ponga buena. Porque me hago mejor haciendo mejor a otros.