Los padecimientos que dejó la pandemia son principalmente económicos, de ansiedad, preocupación o de angustia aumentando la depresión y causal de suicidio en México.
En 2022, el 84 por ciento de la población mexicana que tiene pareja, dijo tener una buena relación con ella o él, mientras que en 2021 este porcentaje llegó a ser de 70 por ciento.
En 2022, ocho de cada 10 mexicanos consideran que son capaces de enfrentar el estrés en la vida, cuando en 2021 solamente seis de cada 10 opinaban lo mismo.
Un Estudio sobre la salud mental de los mexicanos y prevención de suicidio, publicado por Planning Quant, con base a los lineamientos de la INE-ISO-20252, reportó que de 2021 a 2022 es menor la cantidad de mexicanos con afectación salud mental. El 2021 decían tener 3.5 padecimientos, mientras que 2022 solamente 2.3.
En 2021, el 50 por ciento dijo que tenía problemas económicos; 35 por ciento dificultad para dormir; 26 por ciento ansiedad; 27 por ciento preocupación o angustia; 24 por ciento dificultad para concentrarse; 25 por ciento nerviosismo; 23 por ciento de depresión; 21 por ciento sentimiento de soledad o incomprensión; 17 por ciento cansancio excesivo sin razón; 19 por ciento problemas afectivos con la familia; siete por ciento bajo rendimiento académico; ocho por ciento enfermedad crónica; cinco por ciento consumo de alcohol; seis por ciento violencia familiar; tres por ciento consumo de drogas y solamente el 18 por ciento ninguna de estas situaciones.
Depresión, mujeres las más afectadas
La depresión en México afecta al 15.7 por ciento de la población mayor de 18 años, pero en las mujeres la cifra se eleva a través de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración.
Sensaciones y síntomas que, en el caso del total de casos, afecta al 19.5 por ciento de las mujeres, de acuerdo con la primera Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado (ENBIARE) 2021, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De acuerdo con cifras del INEGI, de 2019 a 2021, la cantidad de suicidios incrementó 15 por ciento en México, alcanzando ocho mil 447 casos en 2021, teniendo como base principal la depresión.
Por herencia o predisposición genética, a descompensación hormonal por una reducción de estrógenos, que deriva en una posterior disminución en los niveles de serotonina; un neurotransmisor relacionado con el manejo de las emociones que deriva en una posterior disminución en los niveles de serotonina y alterado manejo de las emociones.
“Es fundamental que los pacientes que sufren de depresión puedan acceder a un diagnóstico oportuno, debido a que, de no recibir atención o tratamientos adecuados, el estado de bienestar integral de los pacientes y su calidad de vida no solo se ven afectados, sino que pueden llegar a presentar pensamientos suicidas”, explicó Santiago Posada, director médico de Janssen México.
El especialista expuso que la depresión es una enfermedad que requiere de un abordaje integral junto con soluciones terapéuticas innovadoras para ayudar a que las personas con trastornos neuropsiquiátricos y neurodegenerativos reciban el tratamiento adecuado de manera oportuna.
“Con 60 años impulsando la investigación en neurociencias, queremos ser embajadores de la salud mental en beneficio de la humanidad. Nuestro papel no es solo liderar el desarrollo de fármacos, también tenemos la responsabilidad de apoyar a los pacientes a través de nuestro trabajo con toda la comunidad médica”, concluyó el directivo.
La depresión puede ser crónica o recurrente y, en su forma más grave, puede conducir al suicidio. De ahí deriva la importancia de que las personas identifiquen los síntomas y puedan ser valoradas a tiempo por un especialista en salud mental.
A pesar de que existen tratamientos efectivos indicados para tratar la depresión, en muchos casos puede haber pacientes cuyos síntomas no mejoran o incluso pueden empeorar, lo cual da indicios de la presencia de depresión resistente al tratamiento (DRT).
Por ello se deben de identificar la DTR y encontrar una alternativa de tratamiento que pueda ayudar al paciente, ya que existen terapias farmacológicas, a base de innovación científica, indicadas para tratar esta forma poco conocida de la depresión.
La DTR se identifica cuando un paciente no ha respondido al menos a dos tratamientos de antidepresivos orales diferentes en el episodio depresivo actual. En la DRT el paciente no alcanza la remisión de los síntomas y tiene recaídas que se presentan con insomnio, fatiga, dolores, ansiedad, bajo rendimiento laboral, mal funcionamiento social e incluso el suicidio.
LG