A diez años de que la federación definiera instalar los filtros a pie de pozo en la Región Laguna para disminuir las elevadas concentraciones de arsénico en el agua de ingesta, persiste en las comunidades rurales de Francisco I. Madero, San Pedro, Gómez Palacio y Tlahualilo concentraciones de hasta de 500 microgramosde arsénico por litro en pozos o norias.
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De ahí proviene el líquido que abastece a la ciudadanía cuando no hay agua en la red, por lo que investigadores consideran que es momento de realizar un nuevo estudio representativo de agua para consumo humano.
Agua con uso agrícola
La Comarca Lagunera es una región con actividad ganadera, agrícola, minera e industrial, se ubica en el centro-norte de México; está conformada por los estados de Coahuila y Durango y debe su nombre a los cuerpos de agua que se formaban, alimentados por los ríos Nazas y Aguanaval, hasta antes de la construcción de las presas Lázaro Cárdenas y Francisco Zarco según se explica en el estudio Evaluación Técnico Económica de Cinco Tecnologías para la Remoción de Arsénico realizado por el IMTA con financiamiento del extinto Fondo Metropolitano.
Según la Norma “Salud Ambiental, agua para uso y consumo humano-límites permisibles de calidad y tratamiento a que debe someterse el agua para su potabilización”, los límites permitidos para el agua de consumo humano son de 25 microgramos de arsénico por litro.
En 2011, la Facultad de Medicina Unidad Torreón levantó un total de 145 muestras en agua de ingesta para determinar los niveles de concentración de arsénico en ocho municipios de la Comarca Lagunera, ellos fueron: Torreón, San Pedro, Viesca, Matamoros, Gómez Palacio, Lerdo y Tlahualio.
Dicho estudio fue realizado por la Facultad de Medicina en conjunto con MILENIO Laguna y Multimedios y entonces se reveló que en el municipio de Torreón, 9 de 21 colonias presentaron niveles superiores a los permitidos en las colonias Metalúrgica, Zacatecas, Las Luisas, Residencial del Norte, Jardines de California, Rovirosa Wade, Residencial Senderos, ampliación Residencial Senderos y Los Fresnos en donde posteriormente se colocaron, precisamente, los filtros a pie de pozo para disminuir las concentraciones.
Filtros a pie de pozo
Desde la perspectiva del investigador Gonzalo García Vargas Miembro de la Sociedad Mexicana de Toxicología e investigador de Tiempo Completo F-3 de la Facultad de Medicina Universidad Juárez del Estado de Durango, los filtros a pie de pozo que se han venido instalando desde 2011, técnicamente ayudan a que las concentraciones de arsénico cumplan con la norma nacional que es de 25 microgramos de arsénico por litro.
El problema dijo, es que los organismos operadores responsables de su mantenimiento casi siempre se encuentran en números rojos, y es que la infraestructura de los filtros a pie de pozo como tanques, conexiones, instalación se colocaron con financiamiento federal a través de la Conagua, dependencia que entre sus facultades tiene la obligación de dar agua en bloque, mientras que, la calidad y distribución del líquido es responsabilidad de los Sistemas Municipales de Agua y Saneamiento.
“Desde 2011 el resguardo y responsabilidad de los filtros a pie de pozo para disminuir el arsénico es de los organismos operadores, a nivel operativo, están haciendo todos los que pueden”, afirmó.
De 2011 a la fecha, no se ha realizado un muestreo representativo que determine el comportamiento del metaloide entre los residentes de la región. Es un problema complejo dijo, puesto que para eficientar el líquido se debe de colocar la micromedición y mejorar las tuberías. Existe una baja eficiencia y eso aumenta el déficit, según el estimado se tiene un promedio de entrega del líquido de apenas un 50 por ciento es decir, la mitad del agua que extrae no llega, se fuga.
El problema que está detectando actualmente es en las comunidades rurales ya que cuando no hay agua de las redes -que es frecuente-, las personas toman el líquido de las norias cuyas concentraciones de arsénico llegan hasta los 500 microgramos de arsénico por litro y como no hay filtros, están bebiendo agua contaminada, esto ocurre en los municipios de Francisco I. Madero, San Pedro, Gómez Palacio y Tlahualilo, mientras que en la red aunque también presenta altas concentraciones estas oscilan entre los 40 a 50 microgramos de arsénico.
Arsénico en el cuerpo humano
El entrevistado también integrante del Sistema Nacional de Investigadores dio a conocer que, la Facultad de Medicina de la Universidad Juárez del Estado de Durango (UJED) realizó un muestreo en 2019 en donde se detectaron elevadas concentraciones de arsénico en la orina de niños de preescolar en Gómez Palacio.
Para este estudio, se analizaron 48 muestras en 2 centros educativos de Gómez Palacio, y se observó que en el 67 por ciento de los niños presentaron valores por debajo de 35 microgramos de arsénico por litro, y el 33 por ciento restante, tuvieron valores superiores, lo que evidencia que existe el metaloide en los menores y esto genera una seria preocupación.
García Vargas, quien fue precisamente el investigador a cargo del estudio, aclaró que esto se debe, muy probablemente a la ingesta de agua contaminada, y que esto pone en riesgo la salud y el desarrollo de la población.
La recomendación del experto en tema de arsénico para conocer la evolución del metaloide entre la población de la Región, es realizar un programa de vigilancia epidemiológica; también es importante colocar sistemas de tratamiento para reducir el arsénico en el área rural y ampliar la capacidad de la red, definitivamente es un veneno que puede matar lentamente.
No se cuenta con un programa de detección de hidroarsenicismo, ni se cuenta con una estadística real, ya que es una enfermedad que va matando lentamente y en ocasiones no se asocian las enfermedades con la exposición al metaloide, de ahí la importancia de que se realice un programa de vigilancia epidemiológica de largo alcance en los laguneros.
Torreón: extracción del agua a 250 metros de profundidad
El gerente general del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento de Torreón, Juan José Gómez Hernández, dio a conocer que en Torreón existen 90 pozos de abastecimiento de agua para la ciudad y 18 son los que cuentan con filtros contra arsénico, estos se colocaron solo en los puntos donde se detectaron elevadas concentraciones del metaloide.
Compartió que en el año de 1950, se bombeaba el agua a 40 metros de profundidad; para el año 2000, se hacía a 120 metros y 20 años después, es decir entre el 2020 y 2021 en la actualidad, se realiza la extracción de agua a 250 metros de profundidad.
En 20 años, el abatimiento de los pozos se duplicó y la proyección para los próximos 20 años preocupa.
“De seguir la tendencia, estamos hablando de un serio problema ya que el metaloide, se encuentra en el subsuelo y obviamente se mezcla con el agua que se extrae”, afirmó.
Filtros se terminan
En lo que se refiere a los filtros a pie de pozo, dijo que la autoridad federal, proyectó la vida útil de los mismos a 25 años y con un buen mantenimiento se pueden conservar hasta por más tiempo y brindar el mejor servicio.
“Los filtros tienen 10 años de estar operando y se colocaron solo en los pozos en donde se detectó alta concentración del arsénico. Pero además, toda la red de agua de distribución se encuentra interconectada por ello, además de los filtros, la concentración del arsénico se va diluyendo con las mezclas”.
Asimismo, dijo que a los filtros a pie de pozo, se les da un mantenimiento preventivo cada seis meses. Desde su perspectiva, la solución sí llega con el Proyecto de Agua Saludable para La Laguna.
“Todos deberíamos de insistir en que se realice este proyecto ya que, la Norma Mexicana habla de límites permisibles en el agua de 25 microgramos de arsénico por litro mientras que la internacional es de 10 y el agua de la presa presenta 12 microgramos de arsénico por litro, es decir que casi cumple con el estándar internacional. Este proyecto ya se tardó mucho, debió iniciar hace 30 años, aunque va por buen camino. Con este proyecto habrá agua en calidad y cantidad”.
Señaló que las ciudades que mejor distribución del líquido tienen, son las que cuentan con el agua de las presas y los que mayor problema de contaminación, las que bombean de las profundidades además que ello genera costo importante ya que de esta forma, se consume más energía.
El desperdicio del líquido también debe de evitarse, por ello es que en la administración, se planeó la colocación de un total de 90 mil aparatos de micromedición ya que este permite controlar el uso del líquido.
Finalmente dijo que hasta el momento todos los filtros a pie de pozo se encuentran operando.
Universidades deberán de iniciar monitoreo
El doctor Javier García Salcedo, coautor del libro Arsénico. Perspectiva Epidemiológica, Ambiental y de Salud e investigador desde hace 47 años sobre el metaloide en la Región, coincide en que es de vital importancia que se realice un monitoreo del agua.
“No se sabe a ciencia cierta cuáles son los pozos de la Región que se encuentran fuera de la norma y cuáles los que sí la cumplen de ahí, la importancia de que instituciones neutrales como universidades realicen un monitoreo del líquido ya que el más reciente y representativo fue el realizado por la Facultad de Medicina de Torreón en conjunto con Milenio y Multimedios Laguna en el año 2011”.
Dijo que los organismos operativos de agua (municipio), manejan monitoreos y la Comisión Nacional del Agua por parte de la federación, cuenta con laboratorio específico para metales pesados y con personas muy capaces.
“Algunas preguntas a las autoridades que siempre hemos hecho desde que anunciaron que se instalarían los filtros a pie de pozo son: ¿Cómo le hacen para saber cada cuando se cambian los filtros?, ¿Qué están haciendo con la residualidad de filtros? y realmente ¿Los están cambiando?, ¿Cuánto dura el filtro? y una vez que se termine la vida útil ¿Qué se va a hacer?”.
Señaló que el arsénico se detecta en la orina pero también se obtiene de las uñas del ser humano. Desde su perspectiva, sólo el organismo operador de aguas de Torreón estaría haciendo lo suficiente para el monitoreo del agua que se distribuye no así el resto de los municipios como lo son: San Pedro, Francisco I. Madero, Viesca, Tlahualilo, y sobre Gómez Palacio dijo que lo desconoce pero fue ahí donde se colocaron filtros intradomiciliarios de los que no se sabe si continúan trabajando o no.
Causa de enfermedades mortales
Señala que una persona que tenga una predisposición familiar a padecer cáncer ya sea de mama, útero, ovarios, colon o próstata y ha consumido agua con arsénico durante largo tiempo el mismo se detona más rápido, de ahí que la Comarca Lagunera presente los primeros lugares en frecuencia de cáncer.
En base a una publicación de la Revista Mexicana de Medicina Física y Rehabilitación en el artículo “Alteraciones electroneuromiográficas en pacientes con hidroarsenicismo crónico regional endémico en la Comarca Lagunera” se establece que en México, en la región de la Comarca Lagunera se ha detectado este problema desde hace varias décadas.
Los estudios epidemiológicos han confirmado que en los municipios de Francisco I. Madero y San Pedro, en Coahuila, así como en Tlahualilo, Durango, se encontró agua de bebida contaminada con arsénico en promedio de 250 microgramos de arsénico por litro produciéndose hidroarsenicismo crónico regional endémico en los habitantes expuestos por más de 16 años. Los casos confirmados de afección presentan manifestaciones clásicas de intoxicación crónica por arsénico.
El poblado que desapareció por arsénico
Narra que los residentes de la comunidad rural de Otzanduri ubicado en el municipio de Francisco I. Madero murieron o se fueron del lugar ya que tenían concentraciones de 1.5 partes por millón de arsénico en el agua.
“Esta localidad desapareció hace más de 20 años, unos murieron otros se vieron obligados a irse, esta localidad se ubica a un lado del Venado en donde había cuando menos de seis personas por familia por lo que era una población de casi 60 personas; otra localidad que también desapareció es Cuauhtémoc Cárdenas al que le decían el Medio Pulmón”.
RCM