El comentario de Marika Vera, sobreviviente de cáncer de mama, y de Janisse Kershenovich, cirujana oncóloga adscrita a FUCAM, en dos diferentes pláticas que proyectan la solidaridad de algunas marcas con el tema, la primera, en la convivencia que organizó Dockers, y la segunda, en la que coordinó Liverpool, genera la misma reacción. Las risas sutiles y al mismo tiempo las espontáneas carcajadas, cuando las dos coinciden en la importancia de la autoexploración y van más allá al dar la opción de que “las parejas nos ayuden con esa labor, pues en algunas situaciones son quienes han detectado esas “aterradoras bolitas”, que pueden representar la muerte o “una experiencia de vida y de gran aprendizaje para quien la vive y para su familia”, como lo compartió Vera.
Ambas hablan de la importancia de la autoexploración para detectar a tiempo el cáncer de mama, ya que de acuerdo a las estadísticas, la doctora destaca que “alrededor de 12 por ciento de las mujeres tienen cáncer de mama. ¿Qué significa esto? que una de cada ocho mujeres va a tener cáncer en algún momento de su vida, porque es el cáncer más común en mujeres, y actualmente se están presentando alrededor de 1.7 millones de casos nuevos por año, de los cuales mueren 500 mil mujeres al año”, por lo que se ha convertido en una enfermedad de gran impacto en México y a escala mundial.
Poco más de 100 mujeres, entre pacientes, sobrevivientes y algunas invitadas a la charla en la terraza de Liverpool Polanco, algunas veinteañeras, otras más adultas y un grupo de maduras de entre 50 y 60 años, escuchan las cifras y en sus rostros aparece el miedo, porque la doctora sigue ilustrando sobre el tema y destaca que “por el simple hecho de ser mujer ya se tiene una posibilidad de padecer cáncer de mama”.
Sin embargo, reitera que detectarlo a tiempo hace la diferencia entre la vida y la muerte. El ejemplo es Marika, quien en la convivencia de Dockers, compartió su experiencia ante 100 invitadas, la mayoría jóvenes que no rebasan los 40 años y que prestan atención a cada comentario de la valiente mujer que superó quimioterapias, radioterapias e incluso la mastectomía.
Y ADEMÁS
SÍNTOMAS DE RIESGO
“Lo primero es un nódulo o una bolita palpable, ya sea en la mama o en la axila, otro punto es que hubiera un cambio de coloración en la piel, que se sienta caliente, que tenga líquido, que llamamos edema, alguna secreción anormal por el pezón, ya sea color amarillo o que tenga consistencia de leche, o que tenga sangre, sobre todo se sospecha cuando es unilateral, cuando es de un solo lado. Algunas veces puede causar dolor, pero el dolor no es un síntoma, porque generalmente el cáncer no causa dolor”.