Aunque ninguna bebida le puede ganar al agua como hidratante, varias hacen una lucha muy decente, pues son más saludables e, incluso, algunas más deliciosas para ciertas personas que no gustan de la propiedad insabora del agua, aquí te damos algunos ejemplos.
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—Agua de aloe vera, que además de tener un sabor diferente te proporciona antioxidantes, te ayuda con la digestión y fomenta el crecimiento celular.
—Jugo de betabel, una bebida dulce que aporta vitaminas A, B y C, además de ácido fólico, antioxidantes, calcio, magnesio, potasio, hierro, hidratos, de carbono, azúcares, aminoácidos y fósforo; esto le permite reducir problemas cardiacos, combatir el cáncer y eliminar radicales libres.
—Té, una de las bebidas más consumidas en el mundo y que evita que la vesícula biliar se inflame, reduce enfermedades en los dientes y encías, disminuye el riesgo de muerte cardiovascular, inhibe el crecimiento de bacterias.
—Jugo de naranja, es depurativo, diurético, antimicrobiano, rico en vitamina C y fructuosa que ayudan al hígado y a los riñones.
—Jugo de manzana, estimula los riñones y el hígado, limpia el organismo, te aporta potasio, ácido málico que neutraliza los ácidos y es ideal para combatir la diarrea y fomentar la digestión.
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Ahora que sabes esto, ya no tienes excusa para beber refrescos porque “el agua no te gusta” mejor ingiere algo que le haga bien a tu cuerpo.
AG