En silla de ruedas y entre aplausos de médicos y enfermeras, a quienes se unieron con sus palmas trabajadores de la construcción que se encontraban cerca, Carlos, de 63 años, originario de la Ciudad de México, fue dado de alta este lunes por la tarde del Hospital de Respuesta Inmediata Covid-19 de Pachuca.
Su hija, María Lourdes, tuvo una videollamada con él antes de llevarlo de regreso a casa en la capital del país tras superar al coronavirus en un estado que no es el suyo.
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Carlos es médico veterinario, tuvo complicaciones para respirar y flemas, esos fueron sus primeros síntomas de covid-19 que lo llevaron a la hospitalización.
Estuvo internado 20 días en el hospital en donde fue intubado por los doctores, “fue muy buena la atención por parte de los médicos y las enfermeras”.
Mientras estaba hospitalizado Carlos pensó que iba a morir, “pero gracias a Dios todo salió bien”.
Los médicos y las enfermeras lo animaban en cada una de las revisiones que le hacían, “me decían que le echara ganas, las enfermeras y los enfermeros me ayudaron mucho”.
Él es uno de las más de 100 personas que han sido hospitalizadas en el nosocomio en los últimos dos meses de la pandemia en la entidad, de las cuales 16 de ellas han perdido la vida.
Carlos dice que tiene familiares en el municipio de Calnali y por ello fue atendido en el Hospital Inflable de Pachuca, “mi hija me recomendó acá”.
Tras su alta médica los doctores le dijeron que debía estar en casa 15 días más sin salir de ella.
En el asiento trasero del auto en el que su hija lo llevaría de regreso a la Ciudad de México contó que primero le pusieron oxígeno, luego lo entubaron y finalmente le volvieron a colocar oxígeno.
“La verdad pensaba que iba a morir, pero ya después de que me dijeron el 20 de mayo que ya la había librado ya fui mejorando hasta ahorita, ya me siento mejor”, dice.
Carlos confió en que no quede con una secuela tras la enfermedad, le duelen los pies, no puede caminar pero cree que es por los días que estuvo hospitalizado.
Dice que su hija es doctora, que probablemente ella llevó el virus a su casa y que por ello enfermó de covid-19.
“La gente no cree y deberían de tomarlo esto muy enserio porque la gente es incrédula, afortunadamente los jóvenes, los niños sí aguantan, pero a los viejitos sí nos va mal”, reflexiona.
Con cubrebocas y lentes negros Carlos dijo que no tenía otra enfermedad antes de contagiarse de coronavirus.
Asegura que se tiene mejor y pidió a sus familiares y a la gente que se cuiden y que sigan las medidas sanitarias que se han implementado como el cubrebocas y el lavado de manos.
Carlos piensa volver a trabajar en su consultorio una vez que esté recuperado totalmente, sin embargo dice que se quedará en casa los 15 días más que los médicos le recomendaron.
Antes de regresar a la Ciudad de México volvió a pedirle a las personas que se cuiden pues aseguró el coronavirus no es un invento.
Carlos salvó la vida y volvió a su casa. Unos días antes su yerno, el esposo de su hija, perdió la batalla contra el covid-19. María Lourdes se quedó sin esposo pero conservó a su padre.