La Luna es uno de los astros que genera mayor fascinación entre artistas y científicos. Así que antes de concluir el mes de mayo, los fanáticos de la astronomía podrán apreciar el fenómeno de la Luna de Flores en México. A continuación, te damos los detalles.
¿Cuándo se podrá ver la Luna de Flores 2024?
En esta ocasión, la Luna de Flores tendrá lugar el 23 de mayo con una distancia geocéntrica de 390, 628 km y un tamaño angular de 30,6 minutos de arco.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE) el 23 de mayo entre las 19:11 y 23:24 horas del centro de México, la Luna tendrá un estrecho acercamiento con la estrella Antares (Alfa Escorpión).
No obstante, las personas que no puedan seguir este horario, aún podrán disfrutar la belleza del satélite natural, ya que este fenómeno aparecerá en su fase completa un día antes y después de la fecha mencionada.
La única recomendación para apreciar este fenómeno es esperar que llegue la noche y buscar un espacio que esté lejos de la contaminación lumínica para ver a detalle la Luna Llena.
Después de la Luna en su fase llena, el 30 de mayo podremos observar el satélite natural en cuarto menguante.
La Luna tiene diferentes fases debido a su posición relativa con respecto a la Tierra y el Sol. A medida que la Luna orbita alrededor de la Tierra, diferentes porciones de su superficie son iluminadas por el Sol.
¿Por qué se llama Luna de Flores?
La Luna Llena de mayo recibe este nombre debido a las tradiciones de los nativos norteamericanos de observar los eventos naturales y ponerles un nombre relacionado a la época del año u otros elementos de la naturaleza como la cosecha y la caza para reconocerlos.
Los nombres de las Lunas fueron recopilados por el Almanaque de agricultores de Maine. Sin embargo, según la cultura, este tipo de fenómenos reciben un nombre diferente.
Por ejemplo, en Inglaterra, se le denominaba la Luna de Leche, aparentemente porque era la temporada en que las vacas se podían ordeñar tres veces al día.
De acuerdo con la NASA, los nativos norteamericanos reconocían la Luna de mayo al coincidir con el florecimiento de varias plantas en América del Norte y la época de la primavera.