Entre cuevas, túneles y pasadizos subterráneos, Tamaulipas cuenta con un registro oficial de 615 cuevas, ubicadas principalmente en la Sierra Madre Oriental, la Sierra de San Carlos, la Sierra de Tamaulipas y aún hay muchas cavernas más que explorar con una enorme diversidad biológica cultural.
Para Arnulfo Moreno Valdez, director de Biodiversidad de la Comisión de Parques y Biodiversidad de Tamaulipas los avances son fascinantes.
La Comisión de Parques y Biodiversidad empezó con el proyecto de cuevas en 2018, dando continuidad a estudios previos de investigadores locales y extranjeros, así como de asociaciones especialistas en estudios cavernícolas que con anterioridad ya habían trabajado en las cuevas del estado.
La mayor parte de esta riqueza se localiza en la Sierra Madre Oriental, Sierra de Tamaulipas y Sierra de San Carlos. Esto se debe a que la roca caliza que las forma se disuelve con el agua de lluvia y al paso de millones de años se forman grandes oquedades.
“Las regiones de la Sierra Madre oriental son las que aportan una mayor diversidad de riqueza biológica, por la gran cantidad de cuevas que contiene”
En ellas se han encontrado especies endémicas, como un alacrán ciego que se registró para la zona de Gómez Farías, o algunas especies de peces, también ciegos en cuevas de las regiones de El Mante, Gómez Farias y Ciudad Victoria.
También hay algunas cuevas que sirven como refugio temporal de murciélagos polinizadores que vienen del norte de Estados Unidos a pasar el invierno en esta zona.
Para la Comisión de Parques y Biodiversidad de Tamaulipas el interés es la importancia biológica que se encuentra en ellas, el estudio de la fauna cavernícola como un componente importante dentro de la ecología de los ecosistemas.
“Hasta el momento han encontrado en las cuevas desde pinturas rupestres o vestigios arqueológicos… pero eso no es de nuestra competencia”.
En ese sentido, explicó que trabajan acompañados de investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia que son los encargados de catalogar e investigar estos datos.
“Nosotros solo hacemos una pequeña anotación y dejamos esas tareas a los expertos”. De los avances obtenidos tras el arduo trabajo de campo, expresó que se está elaborando un catálogo detallado de las cuevas más importantes de Tamaulipas, con una actualización constante.
“Muchas de las cavernas de Tamaulipas han sido investigadas anteriormente por grupos de expertos extranjeros, que de alguna manera han aprovechado esto para ser ellos quienes den a conocer los resultados, pero el campo de la investigación aún tiene mucho por aportar además de que siguen muchas otras cavernas más sin explorar.
Nuestro trabajo consiste en aprovechar las investigaciones anteriores y visitar cuevas con datos previos de fauna cavernícola”.
La mayor parte de esta riqueza se encuentra en la Sierra Madre Oriental, Sierra de Tamaulipas y de San Carlos
En diferentes ocasiones han tenido la colaboración internacional de S.E.Geos (exploraciones e investigaciones subterráneas de Sevilla, España) y de la AMCS (Association for Mexican Cave Studies con sede en Austin, Texas), “a los que les estamos muy agradecidos por su colaboración y capacitación para enriquecer nuestra labor”.
Subrayó que la mejor manera de conservar y proteger estos sitios es educando y fomentando el respeto a las áreas naturales, en algunas cuevas cercanas a lugares poblados, es frecuente que utilicen estos sitios como basureros, sin saber que con estas acciones lo único que logran es contaminar los mantos freáticos o acabar con la fauna cavernícola del lugar.