Una investigación reportó que la detección del cáncer de próstata mediante el tacto rectal (DRE) puede omitirse potencialmente en las estrategias para hallar lesiones en fases iniciales y avanzadas de tumores malignos, por lo que “podría no ser necesario realizar este examen de forma rutinaria”.
“Los hallazgos colectivos de los estudios incluidos sugieren que, en ausencia de síntomas y signos clínicos, el tacto rectal podría omitirse potencialmente en las estrategias de cribado y detección precoz del cáncer de próstata”, se indicó en el estudio.
Especialistas del Departamento de Urología, en el Centro Oncológico Integral de la Universidad Médica de Viena, compararon la capacidad de detección del tacto rectal y el antígeno prostático específico (PSA).
Se comprobó que la exploración basada en la inserción del dedo índice por parte de un proctólogo tuvo un “un valor diagnóstico notablemente bajo”, sobre todo, cuando se carece de síntomas.
Por lo tanto, “el rendimiento de los exámenes de detección del tacto rectal para la detección del cáncer de próstata no es particularmente impresionante, lo que indica que podría no ser necesario realizar este examen de forma rutinaria”.
Los expertos subrayaron que dicho examen invasivo demostró tener un “rendimiento de moderado a pobre”, sumado a ello la variabilidad significativa en la interpretación de los hallazgos.
Por ello, se sugirió que el tacto rectal podría omitirse de las estrategias de detección precoz y con ello se acabará con el hecho de que los hombres postergan ir médico para evitar esa exploración. Además, de que dicho procedimiento “puede provocar un retraso” en el diagnóstico.
Por el contrario, la realización del antígeno prostático específico, que detecta a través de la toma de sangre la presencia de células malignas, elevó la detección temprana, redujo la tasa de mortalidad y es más preciso como biomarcador de detección temprana.
El antígeno prostático acompañado de imágenes de resonancia magnética son las formas más eficaces de “mejorar los protocolos de cribado y detección precoz” del cáncer de próstata.
En la investigación relativa sobre la efectividad del diagnóstico del cáncer de próstata participaron varones de 45 a 98 años.
De los 85 mil 738 participantes, un total de 71 mil 219 hombres se sometieron a pruebas de detección con antígeno prostático, en caso de sospecha, se recurrió a la biopsia de próstata.
Se hizo, además, una comparación de los resultados obtenidos a través del tacto rectal y del antígeno prostático específico.
“Nuestros datos sugieren que la combinación de tacto rectal y antígenos para el cribado del cáncer no tiene un beneficio significativo” es decir, la prueba de antígeno es eficaz para lograr la detección de alguna anormalidad o de sospecha.
“Solo el 20 por ciento de los hombres con DRE o PSA anormales tienen cáncer, y solo entre el 1 y el 2 por ciento de los hombres que se sometieron a exámenes de detección tuvieron cáncer de próstata identificado a través de estos métodos de detección”, de acuerdo con la publicación.
Es común caer en un sobrediagnóstico de cáncer prostático o a los llamados falsos positivos. Se suma a ello que la inspección vía anal causa “malestar físico y estrés psicológico en los pacientes”.
En la investigación se hace mención reiterada de que el antígeno prostático por sí solo no es la solución, por lo que este estudio, cuando hay sospecha, debe de acompañarse de resonancias magnéticas ya que se demostró que este tipo de tecnología contribuye a detectar lesiones mínimas.
"Aunque se recomienda el tacto rectal en combinación con el antígeno prostático específico para la detección del cáncer de próstata, existen datos limitados que respalden su uso como prueba de detección/detección temprana", indicaron en los resultados publicados en la revista SscienceDirect.
Los especialistas, encabezados por el oncólogo Akihiro Matsukawa, identificaron ocho estudios con 85 mil 738 participantes de las bases de datos PubMed, Scopus y Web of Science.
Tras el análisis de los datos, se determinó que si bien no hay diferencia significativa del valor predictivo entre ambos métodos, el antígeno prostático específico tiene una tasa de detección de cáncer significativamente mayor que el tacto rectal.
Además, mencionaron que la combinación de ambos métodos de detección "no mejoró la eficacia del cribado" en comparación con el antígeno prostático específico solo.
"Estos hallazgos sugieren que el tacto rectal podría omitirse potencialmente en el cribado y la detección temprana del cáncer de próstata en ausencia de síntomas y signos clínicos", concluyó la investigación.
ROA