El Día Mundial Sin Tabaco se celebra cada año el 31 de mayo para aumentar la conciencia sobre los riesgos para la salud asociados con el consumo de tabaco y promover políticas eficaces para reducir su consumo en todo el mundo.
Esta iniciativa fue establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1987, y desde entonces se ha convertido en una plataforma global para destacar los efectos devastadores del tabaquismo y abogar por un mundo libre de humo.
El cigarro se vuelve adictivo para muchos fumadores. El inicio del hábito de fumar suele ocurrir durante la adolescencia en la mayoría de los casos.
¿Es realmente adictivo fumar tabaco?
El cigarrillo es adictivo debido a la presencia de la nicotina, una sustancia química altamente adictiva que se encuentra en el tabaco. La nicotina actúa sobre el sistema de recompensa del cerebro, generando sensaciones de placer y bienestar. A medida que se fuma, la nicotina es absorbida rápidamente en los pulmones y se transporta a través del torrente sanguíneo hasta el cerebro.
Una vez en el cerebro, la nicotina activa los receptores de la dopamina, un neurotransmisor que está asociado con la sensación de placer y recompensa. Esta activación del sistema de recompensa genera una sensación de bienestar, lo que lleva a una búsqueda continua de la nicotina para mantener ese estado.
Con el tiempo, el consumo regular de tabaco lleva a cambios en el cerebro que resultan en una tolerancia cada vez mayor a la nicotina. Esto significa que se necesita fumar más cantidad de tabaco para obtener el mismo efecto placentero inicial.
Además, cuando los niveles de nicotina disminuyen en el cuerpo, se experimentan síntomas de abstinencia, como irritabilidad, ansiedad, dificultad para concentrarse y antojos intensos de fumar.
La adicción al tabaco puede ser muy difícil de superar debido a la dependencia física y psicológica que se desarrolla. Muchas personas intentan dejar de fumar, pero pueden experimentar recaídas debido a los síntomas de abstinencia y a los patrones arraigados de comportamiento asociados con el acto de fumar.
Es importante destacar que, aunque fumar tabaco es adictivo, es posible dejar de fumar y superar la adicción. Existen diversos recursos y programas de cesación tabáquica disponibles que pueden brindar apoyo y estrategias para ayudar a las personas a dejar de fumar de manera efectiva.
Además, abandonar el hábito de fumar conlleva numerosos beneficios para la salud, ya que reduce el riesgo de enfermedades graves y mejora la calidad de vida.
A.G.