La zona carbonífera de Coahuila mantiene una alta riqueza en el subsuelo y no sólo por los materiales combustibles que se extraen de ella. En entrevista para MILENIO, el geólogo Héctor Porras, director del Museo de Paleontología en Múzquiz, compartió que el hallazgo de una leguminosa prehistórica coloca a México en el mapa mundial al ser el centro de radiación de Fabaceae, de acuerdo a la revista científica Nature Careers.
En la cultura primaria, en la base de la mexicanidad como componentes agrícolas se consideran al frijol y el maíz hecho tortilla, y mientras en el mundo se realizan discusiones sobre el origen del cacao y el maíz, se puede anticipar que posiblemente una leguminosa, origen del alimento del hombre, tiene cimiento en Coahuila, como génesis de la vida.
“Fabaceae es una de las familias de angiospermas más diversas y se distribuye por todo el mundo en una variedad de entornos. La evidencia más temprana de la familia, anterior a este trabajo, provino de sedimentos del Paleógeno donde se encontró que era diversa en muchos conjuntos fósiles de todo el mundo.
“Aquí, describimos un fruto de leguminosa fósil de la Formación Olmos (Campaniano superior) en el norte de México. Designamos al fruto fósil como Leguminocarpum olmensis Centeno-González, Martínez-Cabrera, Porras-Múzquiz et Estrada-Ruiz sp. nov., y lo relaciona con la familia Fabaceae basado en la presencia de una vaina dehiscente con dos valvas, un ápice con base estilar, estípite corto y venas reticuladas en el pericarpio”, apunta la revista científica Nature Careers.
De esta forma se propone una nueva especie fósil, Leguminocarpumpor. Este fósil proporciona información crítica sobre la larga historia geológica de Leguminosae en todo el mundo, extendiendo significativamente el registro al Cretácico de México.
Una fotos tomadas en medio de la neblina dan constancia del trabajo realizado para validar que en México se descubre la leguminosa más antigua del mundo.
“La familia Fabaceae, conocida como "leguminosas" es un grupo florístico distribuido en todo el mundo (con excepción de la Antártida) y es predominantemente tropical. Algunos de sus miembros más conocidos son famosos por sus usos humanos como el frijol, garbanzo, arvejas, habas, alfalfa, soja, guajes, etcétera”, puntualizó Porras.
Los restos fósiles más antiguos de esta familia procedían de yacimientos del Paleoceno, pero los estimados moleculares apuntaban a un origen más temprano. Sin embargo, los fósiles habían eludido a los paleontólogos por años.
En un artículo recientemente publicado, científicos mexicanos describieron a la especie Leguminocarpum olmensis, nombre que significa "fruto de leguminosa de la Formación Olmos". Esto porque la nueva especie fue descrita con un fruto.
Y porque procede de la Formación geológica Olmos, que data del Cretácico Tardío y que tiene una antigüedad aproximada de 73.5 millones de años (Campaniano).
Este fósil establece que la familia tiene su centro o génesis en América del Norte y en lo que hoy es México. Esto da cuenta de la amplia diversidad de esta familia en este país, pues es el segundo grupo florístico más abundante (después de la familia Asteraceae), con cerca de mil 850 especies descritas.
AARP