Si tienes ganas de meter un poco de humor, sabor, diversión y sensualidad a la relación, entonces ¿qué te parecería jugar con tu pareja e ir subiendo "el tono" hasta llegar al clímax?
Si tu imaginación no es tan buena, pero no sabes a qué jugar, tranquila, aquí te daremos algunas opciones para que vuelvan a reír como niños, pero terminen en una situación para adultos.
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Antes de estar a solas con tu pareja coloca un poco de perfume en tus puntos más eróticos y cuando estén a solas deja que te desnude y olfatee hasta descubrir cuáles son los puntos que más te excitan.
Un clásico: usar crema batida, chocolate o cualquier dulce para aplicarlo en una zona del cuerpo sensible para que tu pareja la lama; descubran juntos cuánto placer pueden resistir.
Atrévete a ser una modelo o que tu pareja lo sea. ¿Cómo? Luciendo un body paiting, la técnica de pintarse ropa en el cuerpo, pero para propósitos de juego pueden pintar lo que sea, deja que los pinceles seduzcan y diviertanse con lo que el otro dibuje, ríanse como niños y gocen como adultos.
Otro clásico, pero que no pasa de moda es el atarse con corbatas, esposas o lo que sea: acaricien y "torturen" a placer al que esté atado, y si están listos cubran también los ojos del sometido. Recuerda que este tipo de juegos deben hacerse con consentimiento y con alguien de confianza.
Ahora que si quieren ir más allá de los límites de su hogar, seduce a tu pareja mandando un mensaje en que le hagan saber que "olvidaron su ropa interior", lo que hace que que aumente el nerviosismo y ansias por llegar a casa para "devorarse" mutuamente.
¿Te animas a jugar con tu pareja?
CR